Los agentes verificaron la crianza de animales porcinos y bovinos, cuyo destino era la faena ilegal. también detectaron que no se cumplían con normas sanitarias de control animal.
Estas acciones buscan desalentar delitos de abigeato o faena clandestina. En la jornada de este jueves, integrantes de la Subcomisaría Tres Lagunas, efectivos de Lomas Senés y Portón Negro efectuaron controles en diferentes comercios dedicados a la venta de productos cárnicos, sumado a la solicitud de papeles que corroboran control de enfermedades en los cerdos, que junto a bovinos se encontraban en los establecimientos.
Además, dialogaron con los propietarios y se les solicitó las documentaciones que justifiquen la procedencia de la carne que tenían a la venta. Entre ellos el certificado visado de compra y venta del animal vacuno faenado; incluido el comprobante del impuesto municipal que acredite el legal sacrificio del animal vacuno y la habilitación comunal.
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Por tales irregularidades, el Ministerio de Agricultura y Ganadería de Córdoba llevó adelante diversos allanamientos en establecimientos dedicados a la faena clandestina. También se avanzó sobre lugares de comercialización de la carne.
“En los operativos se pudo constatar instalaciones dedicadas al faenamiento, desposte de animales y equipo para realizar las mismas no habilitadas para tal fin, no contando con las condiciones higiénico-sanitaria para asegurar la salubridad en los alimentos”, informaron desde el gobierno provincial.
Por otra parte, los agentes verificaron la crianza de animales porcinos y bovinos, cuyo destino era la faena ilegal. “En el caso de los cerdos no se le realizaba el control necesario para la detección de Trichinella Spiralis antes de su comercialización”, aclararon.
Por este motivo, informaron que se procedió al secuestro de los equipos de faena, al decomiso de 500 kilos de carne bovina proveniente de animales faenados clandestinamente y al interdictado de 380 animales porcinos que se encontraban en el lugar sin documentación que acredite su propiedad, ni las condiciones necesarias para su crianza.
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Por último, destacaron que lo decomisado fue llevado a frigoríficos para su desnaturalización en digestor.
