Los abruptos cambios en los distintos patrones climáticos a causa de El Niño en los últimos 40 años, dejaron grandes perdidas económicas a nivel mundial. De cara a un nuevo episodio, el mundo debe prepararse para el impacto.
El fenómeno de «El niño» ya está prácticamente confirmado para los próximos meses, con los pronósticos que indican un 90% de posibilidades de que ocurra desde la primavera 2023, y que su presencia influya en las lluvias y las temperaturas en gran parte del mundo, y Argentina está dentro de los países que sentirá su impacto.
Los cambios en los patrones atmosféricos en el mundo, asociados al fenómeno de El Niño, dejan como resultado importantes lluvias en algunas regiones, lo que deriva en inundaciones devastadoras, mientras que en otro puntos del planeta, genera prolongadas sequías que acaban con los cultivos, merma en las poblaciones de peces y un aumento de las enfermedades tropicales. Todo ello lleva asociado pérdidas económicas elevadísimas, así lo revela un reciente estudio.
Tras los pronósticos positivos en cuanto al retorno de El Niño en este 2023, los investigadores de Dartmouth informan en la revista Science que el costo financiero del patrón climático puede persistir durante varios años después del evento en sí, y costar billones en ingresos perdidos en todo el mundo.
Para la elaboración del informe, a los investigadores les llevó dos años examinando la actividad económica global en las décadas posteriores a los eventos de El Niño de 1982–83 y 1997–98 y encontraron una «firma persistente» de un lento crecimiento económico, más de cinco años después de ocurrido el fenómeno climático.
Tras los episodios más destacados de los últimos años, la economía mundial perdió 4,1 billones de dólares y 5,7 billones de dólares, respectivamente, en la media década posterior a cada uno de estos eventos, la mayor parte a cargo de las naciones más pobres del mundo en los trópicos.
Los investigadores proyectan que las pérdidas económicas globales para el siglo XXI ascenderán a $ 84 billones a medida que el cambio climático amplifique potencialmente la frecuencia y la fuerza de El Niño, promoviendo a distintos desastres naturales severos, como ser, lluvias torrenciales, o mega sequías, que derive en incendios y perdidas de cosechas.
los eventos de 1982–83 y 1997–98 causaron que el producto interno bruto de los Estados Unidos fuera aproximadamente un 3% más bajo en 1988 y 2003 de lo que habría sido de otra manera. Pero el PIB de las naciones tropicales costeras como Perú e Indonesia fue inferior en más de un 10% el mismo año.
Uno de los Niños más potentes en Argentina
El fenómeno ocurrido entre 1997/1998 presentó un gran impacto en Argentina, con 32.800 evacuados y 290.000 personas afectadas por el desborde de ríos, provocando anegamiento de grandes extensiones de territorios y lluvias abundantes registradas sobre todo en las provincias de Misiones, Chaco y Formosa, Entre Ríos, Santa Fe, Corrientes y algunas regiones al este de Córdoba, provocando inundaciones en campos y una importante perdida de cultivos.
Vale destacar que entre los tres más fuertes registrados desde 1950 (1972/1973, 1982/1983 y 1997/1998). Mientras que el potencial Niño 2023, podría alcanzar su máxima intensidad entre noviembre de 2023 y enero de 2024 y extender su permanencia hasta mayo.
La NASA muestra al fenómenos de «El Niño» desde el espacio
Las primeras imágenes del calentamiento de las aguas del Pacifico central fueron divulgadas por La Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA). Las evidencias de la gestación del fenómeno están a la vista.
El nombre se lo dieron unos pescadores que notaron que, a veces, las aguas oceánicas llegaban más cálidas a las costas de Perú en época navideña, en el inicio del verano en Perú. Lo llamaron El Niño en referencia al niño Jesús, pero su explicación nada tiene que ver con la religión.
El fenómeno de El Niño- Oscilación Sur (ENOS) es un patrón climático que implica cambios en la temperatura de las aguas en la parte central y oriental del Pacífico tropical. Este ciclo global tiene dos extremos: una fase cálida conocida como El Niño y una fase fría, conocida como La Niña.
El Niño 2023 visto desde el espacio
En las últimas jornadas las evidencias de un potencial «El Niño» en desarrollo viene de la mano de La Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA), quien detectó desde el espacio las primeras señales de lo que será el fenómeno de “El Niño” este 2023 en el Océano Pacífico ecuatorial.
Los datos más recientes del satélite estadounidense-europeo Sentinel-6 Michael Freilich sobre el nivel del mar, muestran ondas de Kelvin que tienen aproximadamente de 5 a 10 centímetros de altura en la superficie del océano y cientos de kilómetros de ancho, moviéndose de oeste a este a lo largo del ecuador hacia la costa oeste de América del Sur.
El Niño traerá temperaturas por encima de lo normal
Después de un 2022/23 muy caliente a nivel global, el fenómeno de El Niño redobla la apuesta a nuevos eventos extremos de temperaturas.
La temperatura de la Tierra varía cada año debido a las numerosas interacciones entre la tierra, el aire y el océano. Estas complejas conexiones influyen en el clima y las temperaturas a nivel regional y global.
Una de estas interacciones es El Niño – Oscilación del Sur, un fenómeno natural en el que transferencias de calor durante varios meses entre el Pacífico y la atmósfera provocan fluctuaciones de temperatura y precipitaciones en todo el mundo.
Un súper El Niño traería temperaturas récord
Con los pronósticos apuntando a un potencial El Niño a partir de la primavera 2023, Petteri Taalas, jefe de la OMM, en un comunicado expresó “El desarrollo de El Niño conducirá muy probablemente a un nuevo pico del calentamiento mundial y aumentará las posibilidades de batir récords de temperatura”.
Con un nuevo evento El Niño en el horizonte, la ONU señaló que el cambio climático provocado por las emisiones de gases de efecto invernadero está agravando la frecuencia e intensidad de estos fenómenos meteorológicos extremos. Por eso, instó a los países a prepararse para los posibles impactos y a reforzar sus medidas de adaptación y mitigación para hacer frente al calentamiento global.

Con información de: https://news.agrofy.com.ar/