Una de las claves del futuro está en la autosustentabilidad. Esto no es un secreto para nadie, sino todo lo contrario: una tendencia en aumento. Tampoco, es un secreto el hecho de que, para lograrlo, debe contarse con el trabajo de un grupo de personas con un mismo objetivo.
Una de las opciones más asequibles en esta tendencia es la de llevar adelante una huerta comunitaria. Pero, ¿cómo hacerlo de forma adecuada para conseguir un trabajo exitoso y buenas cosechas?
En los párrafos que siguen, compartimos una serie de ideas que pueden resultar útiles para empezar a desarrollar estos espacios colectivos de la mejor manera.
Organizar claramente los horarios y las rutinas de trabajo
La principal clave de una huerta comunitaria tiene que ver, precisamente, con el trabajo colectivo de un grupo de personas. Es fundamental que las tareas y los turnos estén claramente definidos para evitar conflictos que pueden derivar en un mal trabajo.
Lo ideal sería realizar cronogramas semanales en los que se repartan las tareas de acuerdo a su necesidad. El trabajo comunitario bien organizado, sin duda, dará buenos frutos para todos.
Antes de empezar, preparar la tierra de cultivo
Esta puede resultar una idea obvia, pero a veces se pasa por alto que no toda la tierra es buena o está preparada para el cultivo. El suelo es la base de la huerta y por lo tanto debe ser acondicionado para brindar las mejores condiciones.
Hay que limpiar el terreno de malezas que puedan perjudicar a los cultivos y luego abonar para enriquecer la tierra. Recomendamos usar humus de lombriz o compost, que además reducirá la producción de residuos orgánicos.
Planificar los cultivos estacionalmente
Uno de los errores más comunes es plantar cultivos fuera de la época, que darán pocos resultados y terminarán frustrando a los involucrados. Para esto, es clave planificar qué cultivar de acuerdo a las estaciones.
De esta manera, se tendrán mejores resultados, más apropiados al clima y con un desarrollo correcto de las cosechas. Hay un ciclo natural que es conveniente respetar para una buena huerta productiva.
Realizar registros de los procesos del cultivo
Una vez que los cultivos empiecen a desarrollarse, una buena idea es llevar un registro de los mismos. Estos servirán a futuro para ver los resultados de lo hecho, pero sobre todo para ir analizando el desarrollo y corrigiendo posibles fallas.
Hoy, es muy sencillo grabar y hacer videos online sin la necesidad de descargar programas de edición o grandes conocimientos al respecto. Contar con estos materiales será fundamental para ir mejorando.
Ser constantes con el esfuerzo y tener paciencia
Algo que suele suceder con este tipo de iniciativas es que se tenga poca paciencia y se abandone la tarea al no ver resultados inmediatos. Es importante evitar esta frustración entendiendo los tiempos de las plantas y continuar con el esfuerzo.
Esto no solo significará un mayor disfrute de lo cosechado, también supondrá una buena enseñanza. La paciencia del trabajo sostenido en relación a los ciclos de la naturaleza es algo fundamental para la vida del futuro.