¿En qué año el tereré fue nombrado un patrimonio de la humanidad?

Yerba mate, hielo y jugo de cítricos conforman una de las bebidas más clásicas en tiempos de calor: El Tereré. Consumido en países como Paraguay, Argentina, Uruguay y Brasil.

En verano es un verdadero clásico para pasar los días de mucho calor, con sólo tres ingredientes claves podes preparar la bebida. Con hielo, yerba mate y jugo de pomelo, limón o naranja logras una de las bebidas más refrescante, y aún más cuando se toma en la cáscara de un pomelo vacío. En otras regiones de Sudamérica, particularmente en Argentina, el tereré se suele preparar con jugos otras frutas.

En Paraguay se considera una bebida por excelencia infaltable, donde las temperaturas pueden llegar a más de 40°C, no es raro ver a la gente llevar una matera a la escuela o al trabajo; igualmente, tomar tereré está profundamente arraigado en el estilo de vida guaraní.

En Paraguay y otras regiones de Sudamérica, la matera es un contenedor (generalmente, hecho de cuero), que contiene un termo de agua al vacío, una bombilla (una pajita o popote con un filtro en el extremo), una copa en forma de cuerno (guampa), yerba extra y cualquier hierba adicional que pueda agregarse al tereré.

¿En qué año se reconoció?

El “tereré”, de origen paraguayo, bebida ancestral de la cultura indígena guaraní, fue reconocida el 17 de noviembre de 2020 como patrimonio inmaterial de la humanidad por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).

La preparación del tereré se efectúa acorde con un ritual íntimo recogido en una serie de códigos establecidos por los aborígenes.
Su inscripción como patrimonio de la humanidad es también “un reconocimiento al papel de las mujeres paraguayas como responsables de esos preparativos y del mantenimiento de los elementos de esta manifestación cultural tradicional”.
Este patrimonio «proporciona a las comunidades un sentimiento de identidad y de continuidad: favorece la creatividad y el bienestar social, contribuye a la gestión del entorno natural y social y genera ingresos económicos», detalla la Unesco.

Con información de: https://www.dw.com/

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