Detrás de la elaboración de este producto, si bien existe una serie de pasos para lograr el objetivo de “un alimento en lata”, hay una serie de datos que como consumidor tendrías que conocer.
Si bien son muy prácticos para utilizar en el mundo de la cocina, los tomates en conservas o enlatados, a pesar de ser un producto natural, pierden gran parte de sus nutrientes esenciales, los que de por sí la fruta posee antes de pasar por un proceso. La Vitamina A es la que más se ve perjudicada en estos casos. Es una de las más importantes dentro de la alimentación, ya que es indispensable para la vista y para el buen desarrollo de los huesos y la piel
Dentro de lo que conlleva el proceso de un tomate natural en lata, a pesar de la pérdida de las propiedades del alimento, se valora el sabor y la practicidad que representa un alimento en conserva.
A continuación, te vamos a contar y mostrar, de qué manera se elabora el enlatado de tomate al natural, desde el momento del cultivo, el proceso, hasta el producto final. Presta atención:
1. Formación de cama:
El proceso de siembra y cosecha inicia con el trasplante mecánico, al que le sigue el cuidado de labores sanitarias a los cultivos hasta el momento de la cosecha de la fruta.
2. Cosecha:
Actualmente la tecnología aporta para el trabajo de cosecha. Una máquina realiza el elevado de la planta (tomatera), ésta la sacude para que puedan despedir a la fruta (tomate), realizando un trabajo selectivo, ya sea por el tamaño, color, textura o si bien existe algún patrón que pueda alterar la fruta. Luego de este paso de selección, los tomates se trasladan a una planta para ser procesados.
3. Limpieza:
Cuando llega el camión con los tomates a la planta procesadora pasa por la etapa de aseo o limpieza de la fruta en sí. Un grifo de agua alcanza a los tomates, y la misma agua se encarga de trasladarlos hacia una manga colectora. Este canal de limpieza separa algunos cuerpos pesados de las frutas, como ser tierra, piedras o resto de cultivos. Luego son nuevamente lavados por un chorro de alta presión.
4. Selección inicial:
Una vez lavados pasan por una selección manual, donde son elegidos los que presenten condiciones óptimas y se descartan las frutas que tengan manchas, cicatrices, puntos negros, etc. A continuación, pasan por una segunda etapa de selección antes de ser pelados.
5. Pelado:
Para el pelado se provoca el estallido de la piel que los recubre por medio del calentamiento con vapores que actúa entre la capa de la pulpa y la piel del tomate. A continuación, se quitan los restos de piel que puedan quedar adheridos a la pulpa con un pequeño rodillo conocido como pellizcador.
6. Segunda selección manual:
Cuando el tomate pasó exitosamente por el proceso de pelado, una segunda selección manual separará a los que presenten características ideales, detectando imperfecciones o defectos que la tecnología no pudo detectar o solucionar.
7. Envasado:
Una de las instancias finales de elaboración del tomate natural en lata, es cuando la fruta pelada es depositada en la lata con unas envasadoras volumétricas, donde el envase entra vacío y se realiza el llenado con la fruta al natural.
8. Pasteurización y agrupado:
El proceso finaliza con la etapa de pasteurización, con un calentamiento del enlatado a 98 grados centígrados, luego con un proceso de enfriamiento a 40 grados centígrados, asegurando que los microbios no van a desarrollarse en el producto. Como punto final las latas pasan por un etiquetado automático, con la correspondiente información de elaboración, vencimiento, contenidos, aditivos, agregados como conservantes etc.
Revelador video a cerca del proceso durante la elaboración del tomate al natural en lata:
Autora: Viviana Briggith Bermúdez
Estudiante de Ingeniería en Agronomía – Facultad de Ciencias Agropecuarias Universidad Nacional de Córdoba