Los limones argentinos consiguen un nuevo mercado, pero a la carne se le cierran puertas

Chile habilitó la importación de limones desde Argentina, aunque suspendió el ingreso de carne por cambios en el estatus sanitario patagónico.

El Servicio Agrícola Ganadero (SAG) de Chile autorizó el ingreso de limones frescos argentinos mediante la Resolución Exenta N° 5040, que establece los requisitos fitosanitarios para su importación. Según informó el Senasa, los envíos deberán cumplir con un plan de trabajo bilateral enfocado en mitigar el riesgo de plagas como Phytophthora palmivora y Guignardia citricarpa. La apertura fue celebrada por el Gobierno, que la atribuyó a negociaciones sostenidas entre Senasa, la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, y la Cancillería argentina.

En lo que va del año, Argentina exportó 142 mil toneladas de limones a destinos como Estados Unidos, Rusia, Países Bajos y Grecia, lo que posiciona al cítrico como un producto clave en la oferta agroexportadora. La inclusión de Chile como nuevo mercado fortalece ese perfil, en un contexto donde se buscan diversificar destinos y mejorar el acceso a mercados regionales.

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Sin embargo, este avance contrasta con la decisión de Chile de suspender la importación de carne y animales reproductores desde el sur argentino. El motivo es la reciente habilitación, por parte de Senasa, del ingreso de carne con hueso a la Patagonia, medida que modificó los estándares sanitarios de una región que era reconocida como libre de fiebre aftosa sin vacunación. Esto generó reparos en el SAG chileno, que respondió con una suspensión inmediata.

Por su parte, la Unión Europea también expresó preocupación por los cambios introducidos en la normativa argentina. A través de una carta oficial, señaló que podría llevar adelante una auditoría de seguimiento para evaluar si el país continúa cumpliendo con las garantías zoosanitarias previamente acordadas. Desde Bruselas advirtieron que los ajustes legales en Argentina podrían representar un cambio significativo en los términos evaluados durante auditorías anteriores.

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