Una alianza estratégica a lo largo de varios años, enfocada en la gestión de incendios y la preservación de los recursos naturales en el norte de la provincia de Córdoba.
Con el objetivo de fortalecer esta colaboración, ambas instituciones se encuentran en proceso de renovación de su convenio, proyectando nuevas iniciativas que abarcan la planificación de estrategias de manejo de fuego y el control de especies exóticas.
Juan Cruz Molina, director del Centro Regional Córdoba del INTA, resaltó el impacto positivo del trabajo conjunto y el papel fundamental de la ARSCH en la articulación con el sector privado. «La sinergia entre la Asociación Rural Sierras Chicas y los equipos técnicos del INTA ha sido clave para abordar la problemática de los incendios de manera oportuna y eficaz», afirmó Molina, y añadió: «Desde el INTA Centro Regional Córdoba, nos sentimos parte de este espacio colaborativo, trabajando codo a codo para analizar y mitigar el impacto de los incendios en los sistemas de producción y la conservación de los recursos naturales, desde una perspectiva integral del territorio».
Carlos Cárcano, presidente de la ARSCH, destacó la fructífera relación con el INTA y el crecimiento exponencial de la colaboración a lo largo de los años. «La experiencia de trabajo ha sido sumamente positiva. El INTA aporta un valor incalculable a nuestra asociación, contribuyendo significativamente a la preservación del ecosistema serrano. Las capacidades técnicas del organismo, su conocimiento especializado y sus relaciones interinstitucionales enriquecen cada uno de nuestros proyectos», expresó Cárcano.
La ARSCH, fundada en 2021 y compuesta por 35 miembros, abarca un área de 50.000 hectáreas en los departamentos de Punilla, Colón y Totoral, en las Sierras Chicas de la provincia de Córdoba. Esta región, caracterizada por sus pastizales de altura y bosques serranos, es altamente vulnerable a los incendios debido a la acumulación de combustible vegetal y las condiciones climáticas extremas durante las temporadas secas, especialmente en las zonas de interfase urbano-rural, donde el riesgo es cada vez mayor para campos y localidades cercanas.
Además, el territorio donde opera la ARSCH desempeña un papel crucial en la regulación hídrica, ya que constituye la cabecera de cinco cuencas que abastecen de agua a numerosas localidades de las Sierras Chicas. La experiencia ha demostrado que la erosión provocada por los incendios aumenta significativamente el riesgo de desastres ambientales en las zonas bajas de la provincia.
La colaboración continua entre la ARSCH y el INTA se enfoca en consolidar las iniciativas en curso y robustecer las estrategias de prevención y manejo de incendios. ‘Nuestro objetivo es finalizar un manual detallado para la toma de decisiones y capacitar a la comunidad en la prevención y gestión de incendios, trabajando en conjunto con otras instituciones y autoridades competentes’, explicó Molina. Además, el plan de acción para 2025 contempla la optimización de la accesibilidad a los caminos, el aumento de la disponibilidad de agua en zonas elevadas, la creación de cortafuegos y la gestión del material combustible vegetal, elementos clave en las directrices de la ARSCH y el INTA.
Con información de: https://www.argentina.gob.ar/
