Referentes y entidades del sector agropecuario expresaron este lunes su profundo pesar por el fallecimiento del Papa Francisco, quien murió a los 88 años a las 7.35 (hora de Roma).
Las principales instituciones rurales lo despidieron con mensajes de afecto, destacando su legado de humildad, diálogo, paz y compromiso con los más vulnerables.
Desde la Sociedad Rural Argentina (SRA), señalaron:
“Con profundo pesar, despedimos al Papa Francisco, argentino y primer pontífice del continente americano, quien dejó una huella imborrable en el corazón de millones de personas a nivel global.”
La entidad remarcó su legado de unidad y espiritualidad, y recordó su célebre llamado a “hacer lío”, que para la Rural representó una invitación a salir de la zona de confort y ser agentes de cambio.
La Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) lo describieron como un líder que trascendió fronteras:
“Su legado permanecerá vivo en los corazones de millones que encontraron en su palabra una guía para la esperanza y la fraternidad. Acompañamos a la Iglesia y a toda la comunidad católica en este momento de dolor.”
La Asociación Argentina de Angus también manifestó su pesar y destacó:
“Un hombre que dedicó su vida con humildad al servicio de los más necesitados. Nos unimos en oración y acompañamos con respeto y afecto a todos los fieles de la Iglesia Católica y al pueblo argentino.”
Desde la Asociación Criadores de Hampshire Down Argentina subrayaron su mensaje de paz y compromiso con el ambiente:
“Su humildad, cercanía con los pueblos y su incansable prédica por la fraternidad universal dejan una huella imborrable.”
Por su parte, Coninagro destacó su mirada sobre el cooperativismo y su advertencia frente al desarrollo sin conciencia ambiental:
“Un mensaje a los hombres y mujeres del mundo agrícola para subrayar el valor de su trabajo y el riesgo de que la búsqueda del beneficio lleve a la explotación de la tierra.”
Con palabras de afecto y reconocimiento, el agro argentino se une así al duelo global por el fallecimiento del Papa Francisco, “el Papa del fin del mundo”, quien será recordado por su cercanía, compromiso social y espiritualidad transformadora.
