El viento juega un papel fundamental en el transporte del humo de los incendios

La llegada de humo desde el centro de Latinoamérica preocupa. En esta nota te brindamos todo lo que tenés que saber sobre el mecanismo que ejerce el viento para el arrastre del monóxido de carbono en el aire.

En lo que significa la circulación global, el viento actúa como un transportador gigante de partículas por el aire, ya sea polvillo u otro tipo de emisiones. En este caso, arrastrando el humo de los incendios forestales que se están produciendo en la selva de la Amazonia de Brasil, regiones de Bolivia y el Paraguay y llevándolo a grandes distancias, incluso a ciudades que pueden estar a cientos de kilómetros, en el caso de las provincias del norte Argentino y centro del territorio.

El mecanismo de la acción del viento en el aire actúa dispersando no solo el humo visible de los incendios, sino también una amplia variedad de contaminantes, entre ellos las partículas finas y el monóxido de carbono.

¿Cómo sucede esto?

  1. Levantamiento del humo: Cuando se produce un incendio, el calor generado hace que el aire caliente y lleno de partículas de humo se eleve.
  2. Corrientes de aire: El viento, que es el movimiento del aire a gran escala, detecta estas masas de aire caliente y las arrastra.
  3. Dispersión del humo: A medida que el viento sopla, el humo se dispersa y se mezcla con el aire circundante, formando una capa de humo que puede cubrir grandes áreas.
  4. Influencia de la topografía: La forma del terreno, las montañas y los valles, pueden influir en la dirección y velocidad del viento, afectando así la trayectoria del humo.

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Factores que influyen en el transporte del humo:

  • Intensidad del incendio: Cuanto más intenso sea el incendio, mayor será la cantidad de humo generado y más lejos podrá llegar.
  • Condiciones meteorológicas: La dirección y velocidad del viento, la temperatura, la humedad y la estabilidad atmosférica son factores clave que determinan la dispersión del humo.
  • Topografía del terreno: Como mencionamos antes, la forma del terreno puede influir en la dirección del viento y, por lo tanto, en la trayectoria del humo.

Consecuencias de la llegada del humo a las ciudades:

  • Deterioro de la calidad del aire: El humo contiene partículas finas y gases tóxicos que pueden causar problemas respiratorios, irritación de ojos y garganta, y aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
  • Reducción de la visibilidad: El humo puede reducir significativamente la visibilidad, lo que puede afectar el transporte y otras actividades al aire libre.
  • Impactos en la salud pública: La exposición al humo puede provocar un aumento en las hospitalizaciones y las muertes relacionadas con problemas respiratorios y cardiovasculares.

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¿Qué otros contaminantes pueden ser transportados por el viento?

Además de las partículas finas y el monóxido de carbono, el viento puede dispersar otros contaminantes como:

Metales pesados: Partículas de metales pesados como el plomo y el mercurio pueden ser arrastradas por el viento y depositarse en el suelo y el agua, contaminando el medio ambiente.

Óxidos de nitrógeno: Estos gases irritan las vías respiratorias y contribuyen a la formación de smog.

Compuestos orgánicos volátiles (COV): Estos compuestos pueden reaccionar con otros contaminantes para formar ozono a nivel del suelo, un potente irritante para los pulmones.

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