Son frecuentes en primavera y el verano, cuando coinciden ciertos factores de tiempo y provocan que la temperatura se disparen de forma absoluta. En este breve informe te explicamos el origen de las olas de calor y los frentes de aire caliente.
Entramos a una etapa del año donde debemos conocer ciertas características del tiempo que nos tocará enfrentar: Días de mucho calor, humedad y las tradicionales olas de calor generadas por los bloqueos atmosféricos. En esta oportunidad vamos a hablar del frente cálido. En resumen, se trata una zona de transición en la atmósfera donde una masa de aire cálido y húmedo desplaza a una masa de aire frío y denso. Esta transición suele ser gradual, a diferencia de los frentes fríos que son más abruptos.
Vale aclarar que si bien los frentes cálidos suelen traer consigo un aumento de la temperatura, no siempre se asocian con olas de calor.
Características de un frente cálido:
- Inclinación suave: El aire cálido, siendo menos denso, se eleva sobre el aire frío formando una pendiente suave.
- Nubosidad: Antes de la llegada del frente cálido, se forman nubes estratiformes de gran extensión, como los cirros, cirrostratos y altoestratos. Estas nubes producen precipitaciones ligeras y prolongadas, como llovizna.
- Aumento gradual de la temperatura y humedad: A medida que el frente cálido avanza, la temperatura y la humedad aumentan gradualmente.
Te puede interesar: Ola de calor: ¿Qué hacer y qué no durante los periodos de temperaturas exigentes?
¿Cómo generan las olas de calor?
Si bien los frentes cálidos no son la única causa de las olas de calor, pueden contribuir significativamente a su desarrollo. Aquí te explico cómo:
- Advección de aire cálido: Una de las principales características de un frente cálido es la advección de aire cálido y húmedo hacia una región. Este aire caliente eleva las temperaturas en la zona afectada.
- Subsidencia: A menudo, detrás de un frente cálido se establece una zona de alta presión. Esta alta presión provoca subsidencia del aire, es decir, el aire se hunde. Al descender, el aire se comprime y se calienta adiabáticamente, contribuyendo al aumento de las temperaturas en superficie.
- Inhibición de la convección: La presencia de aire cálido y húmedo en niveles bajos de la atmósfera puede inhibir la formación de nubes convectivas, como los cúmulos y cumulonimbos. Estas nubes son importantes para el desarrollo de tormentas y precipitaciones, que ayudarían a enfriar la superficie.
- Efecto de isla de calor: En áreas urbanas, el calor atrapado por los edificios y el asfalto puede intensificar aún más las altas temperaturas causadas por un frente cálido.
En resumen, los frentes cálidos pueden generar olas de calor al mantener sin cambio al aire cálido en una región, al provocar subsidencia y calentamiento adiabático del aire, y al inhibir la formación de nubes convectivas que ayudarían a enfriar la superficie, siendo las altas presiones (A) las protagonistas del escenario climático.
Leer también: ¿Qué son las olas de calor y por qué se producen?
Otros factores que pueden influir en la formación de olas de calor:
- Sistemas de alta presión: Un sistema de alta presión persistente sobre una región puede generar un calentamiento significativo debido a la subsidencia del aire.
- Corrientes oceánicas: Las corrientes oceánicas cálidas pueden aumentar las temperaturas del aire en las zonas costeras.
- Cambio climático: El cambio climático está aumentando la frecuencia e intensidad de las olas de calor en muchas regiones del mundo.
