La leche de vaca es un gran alimento natural por excelencia, ya que proporciona una gran variedad de proteínas y minerales. Pero ¿por qué es blanca?
La leche de vaca es un alimento por excelencia para los bebés, niños, jóvenes y también adultos, ya que proporciona todos los nutrientes que el organismo necesita para su desarrollo, también para fortalecer los huesos y el sistema inmune.
Vale mencionar que la leche es una combinación de diferentes propiedades; ya que contiene coloides en pequeñas partículas sólidas de caseína, más conocidas como micelas, también una emulsión de glóbulos de grasa y de vitaminas liposolubles en suspensión, una solución de lactosa, proteínas solubles en agua, sales minerales y otras sustancias, o sea, una verdadera dosis alimenticia con múltiples propiedades para el organismo.
La mayor parte de sus características físicas de la leche se debe a la presencia de las micelas y los glóbulos de grasa. Existe una relación directa entre la cantidad de grasa y la de proteína; cuanta mayor cantidad de grasa existe, habrá también mayor cantidad de proteínas.
Un dato no menor a cerca de este alimento natural, es que las proteínas constituyen entre el 3 y 4% del peso total de la leche y se clasifican en dos grandes grupos: caseína y proteínas séricas (o no caseína).
De todos modos, también hay personas que presentan intolerancia a la lactosa, un azúcar difícil de digerir. Esto se debe a que las personas adultas, en realidad, no deberían beber leche, para evitar inconvenientes en el organismo.
La leche contiene aproximadamente un 5 % de lactosa, un 4 % de grasas y un 3% de proteínas. También es una fuente de calcio, ya que es la proteína más presente en este líquido. La combinación de la caseína junto a ciertas grasas es lo que le aporta el color blanquecino a la leche de la vaca.
¿Por qué la leche es blanca?
La leche contiene diversas moléculas que no absorben el color, entre las que se encuentran la caseína, el calcio y las grasas. La caseína supone el 80 % de las proteínas de la leche, y esta se libera en el líquido en forma de micelas (grupos de varias moléculas de caseína unidas entre sí debido al fosfato de calcio u otros minerales). Estas micelas de caseína reflejan la luz, causando que la leche parezca de color blanco.
Pero también puede ser amarilla
Existe un tipo de leche, conocida como calostro, que es de color amarillento. Esta es la primera leche de la madre y es fundamental para que los terneros fortalezcan su sistema inmunológico. Es amarilla porque es rica en betacarotenos, una sustancia que actúa casi como una vacuna.
El color amarillento en la leche también puede deberse a la acción de alguna bacteria o a la alimentación de la vaca, ya que una dieta rica en carotenos (presente en muchas hortalizas como las zanahorias o las calabazas) otorga a la leche un color amarillo verdoso.
Con información de: https://www.gob.mx/