El agro argentino se prepara para las tormentas solares

Una eyección de masa coronal o una fulguración solar (colectivamente, una tormenta solar) es un evento energético del Sol que perturba la magnetosfera terrestre. La consecuencia directa es la potencial degradación o pérdida de la señal en las comunicaciones satelitales (como el GPS), afectando directamente la operación de equipos como la maquinaria y drones en el sector agrícola.

Las tormentas solares, poderosas explosiones de energía provenientes del Sol, tienen el potencial de perturbar el campo magnético terrestre, causando fluctuaciones en las señales de satélites y afectando sistemas cruciales como la electrónica, las comunicaciones y el guiado automático.

Este fenómeno se intensifica en ciclos de aproximadamente 11 años, y se anticipa que entre 2025 y 2026 alcance su punto máximo. Esta intensificación podría impactar directamente la precisión de la tecnología satelital utilizada en la agricultura.

Análisis y recomendaciones del INTA Manfredi

Ante este panorama, un equipo de especialistas del INTA Manfredi (Córdoba) está investigando cómo la actividad solar influye en la precisión de los equipos agrícolas, buscando generar recomendaciones prácticas para fortalecer el desempeño de la maquinaria.

  • Fenómeno de Cintilación Ionosférica: Diego Villarroel, especialista del INTA Manfredi, explica que se espera un incremento en la cintilación ionosférica durante 2025 y 2026, un efecto natural que produce pequeñas fluctuaciones en las señales satelitales.
  • Objetivo: El trabajo del INTA busca que los productores agrarios comprendan este fenómeno y cuenten con información confiable para anticiparse, planificar y mantener la eficiencia de sus labores.

La precisión como eje de la mecanización

El piloto automático marcó un antes y un después en la agricultura moderna, elevando la precisión de las labores:

  • Pulverización: Evolución del banderillero satelital a sistemas de guiado más precisos, con control individual de picos que minimiza el solapamiento y ahorra insumos.
  • Cosecha: Permite un ancho de labor constante y la generación de mapas de rendimiento de alta calidad.
  • Siembra: Reemplazo de marcadores tradicionales por guiado con corrección diferencial.

La Importancia de la Señal Correctora

Según Villarroel, la calidad de la señal correctora es un factor determinante, ya que cada labor (siembra, fertilización, pulverización, cosecha) exige un nivel de precisión distinto. Para cultivos de alto valor (como maíz, papa o maní), recomienda invertir en señales de alta calidad, que pueden ofrecer precisiones de hasta dos centímetros.

Mayor estabilidad gracias a la diversidad satelital

Un punto positivo es la notable ampliación de los sistemas satelitales disponibles. A los tradicionales GPS (EE. UU.), se han sumado:

  • GLONASS (Rusia)
  • Galileo (Unión Europea)
  • BeiDou (China)

Esta multiplicidad de fuentes mejora significativamente la estabilidad, precisión y rapidez con que los equipos logran obtener una señal confiable.

Monitoreo clave: El indice Kp

La tecnología permite monitorear las condiciones que podrían afectar su funcionamiento. El índice Kp es una escala de gran relevancia que mide la perturbación geomagnética y ayuda a anticipar posibles inestabilidades de la señal:

  • Valores óptimos (0 a 4): Indican condiciones ideales para el trabajo con piloto automático o drones.
  • Valores altos (más de 4): Sugieren momentos de mayor inestabilidad.

El especialista subraya la importancia de consultar aplicaciones o plataformas que informan el índice Kp en tiempo real para la planificación diaria.

Prevención y buenas prácticas operativas

Villarroel reconoce que, si bien los fenómenos solares no se pueden evitar, sí es posible minimizar sus efectos con actualización tecnológica y buenas prácticas:

  1. Actualización de Equipos: Es fundamental mantener al día receptores, monitores y softwares. Las versiones recientes mejoran la convergencia de la señal (velocidad con que el sistema recupera la precisión tras una interrupción), lo que se traduce en mayor confiabilidad y eficiencia en el campo.
  2. Monitoreo Diario: Monitorear la estabilidad de la señal (índice Kp) antes de comenzar las labores es una práctica sencilla pero valiosa que evita errores y ahorra tiempo.

El objetivo final del INTA es fortalecer la toma de decisiones de los productores, permitiéndoles mantener la eficiencia operativa incluso cuando las condiciones naturales imponen desafíos.

Con información de: https://www.argentina.gob.ar/

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