Guía tutorial para la siembra de gramínea en casa

En primavera y verano, son una excelente oportunidad de incorporarlas al jardín sin temor a que se extiendan y acaben apoderándose del terreno. Puedes cultivar las gramíneas ornamentales en macetas o contenedores. Te enseñamos como hacerlo.

Las gramíneas son un tipo de planta muy común y versátil. De hecho, pertenecen a la familia de las Poaceae y son la base de la alimentación de muchos animales, incluyendo al ser humano (a través de cereales como el trigo, el arroz y el maíz).

Sembrar gramínea en casa puede transformar tu jardín en un espacio verde y acogedor. Te guiaré paso a paso en este proceso:

Preparación del terreno para la siembra

  1. Elimina lo existente: Retira cualquier hierba, maleza o restos de plantas anteriores.
  2. Afloja la tierra: Cava o rastrilla el suelo para aflojarlo y permitir una buena aireación.
  3. Nivela el terreno: Asegúrate de que el suelo esté lo más nivelado posible para una siembra uniforme.
  4. Elimina piedras y objetos: Retira cualquier piedra, rama u objeto que pueda interferir con el crecimiento de la gramínea.

Siembra de la gramínea en casa:

  1. Elige la gramínea adecuada: Existen diferentes tipos de gramíneas, cada una con características distintas. Investiga cuál se adapta mejor a tu clima y a las condiciones de tu jardín.
  2. Prepara las semillas: Mezcla las semillas de gramínea con un poco de arena para distribuirlas de manera más uniforme.
  3. Siembra: Esparce la mezcla de semillas de manera uniforme sobre el terreno preparado. Puedes utilizar un sembrador manual o esparcirlas a mano.
  4. Riega suavemente: Después de sembrar, riega el terreno de manera suave y constante para mantener la humedad.

Cuidados posteriores:

  1. Riego regular: Mantén el suelo húmedo, pero evita encharcamientos. La frecuencia de riego dependerá del clima y del tipo de gramínea.
  2. Evita pisar: Durante las primeras semanas, evita pisar el área sembrada para permitir que las semillas germinen y las plántulas se establezcan.
  3. Fertiliza: Una vez que la gramínea haya brotado, puedes aplicar un fertilizante específico para césped para promover su crecimiento.
  4. Corte: Cuando la gramínea alcance una altura adecuada, puedes comenzar a cortarla con un cortacésped.

Consejos adicionales:

  • Mejor época para sembrar: La primavera y el otoño suelen ser las mejores épocas para sembrar gramínea, ya que las temperaturas son más moderadas.
  • Control de malezas: Realiza un control regular de las malezas para evitar que compitan con la gramínea por nutrientes y agua.
  • Protección contra plagas: Si observas alguna plaga, aplica los tratamientos adecuados para evitar daños en tu césped.

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