Rojos, verdes, amarillos… la gama de pimientos da para un auténtico arco iris de colores. ¿Qué diferencia hay entre ellos? ¿Varía en algo dependiendo su color?
Los pimientos son una de las hortalizas que no pueden faltar en las recetas de cocina, prácticamente se utilizan diariamente. Posiblemente a la hora de comprarlos te encontrarás con muchas dudas a la hora de elegirlos, sobre todo porque suele haber hasta cuatro tipos de diferente color, y a veces varía el tamaño o forma. Por lo general los hay rojos, verdes, amarillos y naranjas veteados. Por eso hoy te explicamos qué diferencias hay en los pimientos en función del color.
En realidad, los pimientos cambian su color en función de su maduración, eso es así. Pero se comercializan variedades diferentes, y cada una de ellas se asocia a un color, de hecho estos también se van volviendo rojos si los dejas en la planta. ¿Qué pasa entonces? “Siempre se vende verde porque no tiene la tonalidad que se identificaría como pimiento rojo. Es decir, cada variedad se comercializa de un determinado color.
El pimiento es ideal para aportar buen sabor a los platos de comida, también muy apreciados por los beneficios que aportan al organismo, ya que poseen muchos nutrientes, además se trata de una hortaliza rica en antioxidantes, fibra y vitamina C.
A continuación te vamos a describir los 4 colores de pimientos que puedes encontrar en supermercados, verdulerías:
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El pimiento de color verde es cuando el fruto se encuentra todavía en una fase de maduración. Presenta un alto contenido en vitaminas A y C, pocas calorías, mucha agua, fibra. Un detalle a destacar, es que su sabor resulta más suave y menos dulce que los más maduros.
Por otro lado, el pimiento rojo se encuentra más maduro y resulta el más nutritivo de todos. En cuanto a su sabor, resulta bastante dulce y es rico en vitamina A y C . También se considera una potente fuente de betacarotenos. Hay que destacar su contenido en licopeno, que se trata de un antioxidante muy importante que se encarga de darle ese tono rojo y que contribuye a mantener la presión arterial y el corazón en perfecto estado.
El pimiento amarillo o anaranjado posee las mismas calorías que el pimiento verde, pero destacan sobre todo por su aporte en vitamina C. El color que presentan les permite contar con betacaroteno, que resulta muy importante para la salud de la vista, el sistema óseo y el sistema inmunológico.
Cuando vayas a comprar pimientos a la verdulería, intenta que presenten un aspecto carnoso y duro, además de pesados en proporción a su tamaño. El color debe ser lo más brillante posible, con una piel lustrosa y lisa, sin golpes y sin agujeros. Aunque no le concedamos demasiada importancia al tallo, también nos dará señales sobre su estado. Procura que esté crujiente, firme y verde.
En el momento en que veas un pimiento con arrugas o manchas, eso demuestra que ha estado guardado durante bastante tiempo en algún almacén a la espera de su venta. Por lo tanto contendrán menos sabor y nutrientes a la hora de comerlos y prepararlos.
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¿Cómo conservar los pimientos?
En lo que se refiere a la conservación de los pimientos, lo mejor es guardarlos en la heladera en el interior de una bolsa de plástico, tratando que la bolsa presente orificios para que transpiren en el caso de que se encuentren crudos. Si ya están cocinados y pelados, lo ideal sería escaldarlos en agua hirviendo por espacio de tres minutos y a continuación meterlos en el congelador o freezer.
Si sigues estas recomendaciones, tus pimientos se conservarán en mejor estado en el frío de la heladera y además ya no tendrás tantas dudas a la hora de comprarlos en la verdulería del barrio, ahora que conoces la diferencia dependiendo de su color.