La extinción de plantas ha avanzado a un índice innaturalmente alto en los últimos 100 años, escalando unas 500 veces más rápido de como era antes de la Revolución Industrial
La sobrevivencia de los ecosistemas forestales es vital para la humanidad, sin embargo, pocas veces nos paramos a pensar en la dramática situación que están atravesando los bosques en todo el mundo. Es que los bosques, que contienen el 80% de la biodiversidad del planeta pierden, anualmente, 13 millones de hectáreas, una superficie equivalente a la cuarta parte de la península ibérica.
La causa principal de la extinción de las plantas es la actividad humana. Específicamente la actividad humana que destruye de manera directa la flora, como la deforestación para la agricultura, madera o construcción de asentamientos humanos y urbanización. Adicionalmente, el cambio climático ha traído consigo patrones extremos de clima, tales como la sequía y las inundaciones cada vez más frecuentes, que pueden hacer mucho más complicado para ciertas especies de plantas su floración y, en consecuencia, su reproducción. La contaminación del suelo y del agua tienen similares efectos
Botanic Gardens Conservation International (BGCI), ha lanzado un reporte titulado ‘El estado de los árboles’ donde concluye que un tercio de los árboles del mundo están al borde de la extinción. La mitad de las especies de árboles existentes en todo el planeta, podrían desaparecer de la faz de la Tierra y las alarmas se encienden.
Los expertos encargados de realizar el informe de la BGCI con sede en Londres, dicen que 17,500 especies de árboles se encuentran en peligro de extinción. Para ponerlo en contexto, esta cifra representa el doble de la cantidad de mamíferos, aves, reptiles y anfibios amenazados, todos juntos. Los datos sugieren que podríamos perder la mitad de la biomasa arbórea si no se emprenden acciones de conservación.
La tala es la principal amenaza
En total se estima que existen 60 mil especies de árboles en el mundo y por primera vez se tiene un conteo de cuáles de ellas necesitan acciones de protección, dónde habitan y cuáles son las mayores amenazas, explica Malin Rivers, de la BGCI.
Del total de especies de árboles, 147 ya han desaparecido del medio ambiente, mientras que 442 se encuentran al borde de la extinción. Entre las mayores amenazas para los bosques a nivel mundial y el porcentaje de especies que afectan, se encuentran la agricultura que afecta a un 29% de las especies de árboles. Le siguen la tala (27%), ganadería (14%), desarrollo urbano y comercial (13%) e incendios (13%).
Los bosques más vulnerables con mayor cantidad de especies de árboles en peligro de extinción son los de Madagascar. En la isla africana hay un total de 1,842 de especies amenazadas, cifra que a su vez representa el 59% del total de especies de la isla. La Amazonía brasileña es otro de los sitios naturales que más daño ha sufrido, tanto sus especies de animales como de árboles han perdido su ecosistema a causa de la tala ilegal. En esta región de Sudamérica, el 20% de las 1,788 especies de árboles están amenazados. Indonesia es el tercer país que está sufriendo la pérdida masiva de bosques a nivel mundial con un 23% de especies amenazadas de su total de 1,306.
Salvemos a nuestros bosques
Sin duda las cifras han alarmado a los expertos, por lo que han aprovechado para lanzar un llamado para emprender acciones de protección y conservación. “El informe nos da esa hoja de ruta para movilizar a la comunidad conservacionista en general y otros actores clave para asegurar que la conservación de los árboles esté al frente de la agenda de conservación”, dijo Rivers.
Una de las líneas de acción se basa en ampliar las áreas protegidas de la mano de distintas organizaciones a nivel mundial. Según el informe, el 64% de las especies amenazadas de árboles se pueden encontrar en al menos un área protegida. Por lo que hay que reforzar los esfuerzos para garantizar la conservación en sitios que ya gocen con el estatuto de reservas naturales.
Pero sobre todo, el esparcimiento de consciencias verdes es fundamental para salvar a nuestros bosques. Los esfuerzos de reforestación no requieren acciones aleatorias, sino que debe plantarse el árbol correcto en el lugar correcto. Por lo que es necesario abrir información para todo público, para valorar la vida natural y emprender las acciones adecuadas de preservación, protección y conservación.
Con información de: https://ecoosfera.com/