¿Cuál es la realidad sobre este evento climatico que amenaza al agro argentino? Para el campo sobrevuelan los fantasmas del 2022/2023, y ahora todo parece apuntar a un potencial fenómeno de La Niña para la campaña 2024/25.
Si bien hay cierta incertidumbre sobre las probabilidades de un evento La Niña para los próximos meses, con una fuerte variabilidad climática en el momento de realizar los pronósticos globales, los especialistas siguen afilando el pronóstico y dan mayor probabilidades de que la corriente de «La Niña» retorne desde la primavera 2024, lo que podría influir en el clima de Argentina durante el próximo verano, lo que será determinante para la toma de decisiones agrícolas para la parte final del año. Vale destacar que el año pasado, el fenómeno le costó al país más de u$s22.000 millones en exportaciones, y un nuevo suceso sería un fuerte impacto en el sector.
En sus últimos reportes, la Oficina Meteorológica de Australia declaró la alerta de La Niña, ya que la presencia de este fenómeno climático suele provocar un clima más húmedo en el este de Australia y el sudeste asiático y más seco en el continente americano, donde la republica Argentina se ve seriamente afectada por la ausencia de lluvia y los calores extremos.
El fenómeno de La Niña está asociado al enfriamiento de las aguas del océano Pacifico central ecuatorial y esto se traduce en contenido bajo de humedad ambiente, lo que influye en el régimen de precipitaciones y de temperaturas en Argentina.
¿Un evento más intenso de lo esperado?
Con las observaciones recientes, según los modelos más actualizados, el equipo de pronosticadores predice probabilidades casi iguales para ENSO-neutral y La Niña en septiembre-octubre 2024, con probabilidades más altas para La Niña hacia el mes de noviembre.
Lo cierto es que los modelos numéricos de predicción daban leves señales de una La Niña débil cuya formación se ha ido retrasando con el tiempo, pero con las últimas actualizaciones los pronósticos se afianzan un poco más.
Con los últimos análisis brindados por el Centro Europeo de Predicción a Medio Plazo, ECMWF por sus siglas en inglés, ha dado un cambio en sus últimas predicciones, algo conservadoras en las predicciones anteriores del fenómeno de La Niña, y ahora se habla a que podría darse un evento de intensidad moderada, incluso, más fuerte que las anteriores.
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Aunque el enfriamiento de las SSTs ha estado más lento de lo anticipado, las temperaturas de la subsuperficie bajo el promedio y las anomalías de los vientos del este en los niveles bajos permanecen propicias para el desarrollo de La Niña en los siguientes meses.
Con los últimos datos suministrados por los especialistas se espera que continúen las condiciones de ENSO-neutral por los próximos meses, con el favorecimiento del surgimiento de La Niña durante septiembre-noviembre (66% de probabilidad) y persista hasta el verano del hemisferio sur de 2024-25 (74%) de probabilidad durante noviembre-enero en Argentina.
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¿La Niña 2024 traería otro evento de sequía extrema?
Por el momento, la actualización de los pronósticos a corto plazo siguen indicando que «El Niño» esta ausente en el hemisferio sur, manteniendo las aguas del Pacifico en estado NEUTRAL en el trimestre julio, agosto y septiembre. De todas maneras, según las proyecciones climáticas, a partir del trimestre octubre, noviembre y diciembre existiría un 79 % de probabilidad de transitar una fase “La Niña”.
Probables contrapesos de un nuevo episodio La Niña: Es importante destacar que, aunque la “Niña” se asocia comúnmente con una reducción en las precipitaciones (lluvias por debajo de lo normal para varias regiones del país), el fenómeno no garantiza necesariamente un periodo de sequía para Argentina, pero el campo se encuentra alerta por un posible evento de lluvias por debajo de lo normal, lo que sería un golpe para las campañas agrícolas venideras.
Hay que tener muy en cuenta que los factores adicionales, como la actividad en el Atlántico y la humedad proveniente del Amazonas, juegan un papel crucial en el comportamiento de las lluvias a nivel regional.
Sin embargo, la rapidez en el cambio hacia un evento “Niña” fuerte subraya la importancia de una vigilancia constante y una preparación adecuada ante los desafíos que el clima puede presentar.
Eventos de alto impacto de un pasado no tan lejano con La Niña
Sin ir muy lejos, aún están latente los efectos del último triple episodio de La Niña, que abarcó la campaña agrícola 2021, 2022 y principios del 2023, la que dejó una sequía histórica y una seguidilla de eventos de calor sin precedente, impactando sobre todo en la región núcleo y área central del país, con perdidas cuantiosas dentro del circuito agropecuario nacional, donde afectó a los cultivos de trigo, soja y maíz.
Si se hace un repaso en cuando a los eventos continuos de «La Niña en la historia», no existen muchos casos de tres campañas La Niña seguidas. El más cercano corresponde a las campañas 1998-1999, 1999-2000 y 2000-2001. En estos casos, los promedios de enfriamiento durante el semestre octubre-marzo fueron de -1.3°C, -1.4°C y -0.7°C, respectivamente.
Mientras que los eventos más recientes han sido mucho más leves, con promedios de -0.9°C en la campaña 2020-2021 y de -0.8°C en la 2021-2022. Según los modelos de pronóstico, el promedio para la campaña 2022-2023 sería de aproximadamente -0.5°C, en el límite entre un evento «La Niña» y lo que fue una fase neutral desde el mes de marzo 2023, de acuerdo a los datos reportados.
Con información de: https://agroverdad.com.ar/ https://www.ambito.com/