Uno de los protagonistas de todo asado, después de los chorizos y las morcillas, el chinchulín es la achura que no puede faltar en la parrilla.
¡Los chinchulines son una de las achuras más apreciadas en un buen asado argentino! Para que queden tiernos por dentro y crocantes por fuera, es fundamental seguir algunos pasos clave. Aquí te presentamos un guía completa para prepararlos de manera correcta.
Los chinchulines son una de las estrellas indiscutidas de cualquier asado argentino. Su sabor intenso y textura única los convierten en un manjar para muchos. A todo esto se destaca su sabor es fuerte y característico, con notas ligeramente amargas que muchos encuentran adictivas. Cuando se cocinan correctamente, quedan con una capa exterior crujiente y un interior tierno.
Ahora pasemos a rever la mejor manera de preparar los chinchulines para la parrilla. Tomá nota de estos pasos a seguir y lograr unas ricas achuras asadas.
Limpieza y Preparación:
- Selección: Elige chinchulines frescos y de buena calidad. Asegúrate de que estén limpios y sin restos de sangre.
- Lavado: Lava los chinchulines con abundante agua fría y vinagre. Esto ayudará a eliminar cualquier impureza y a desinfectar.
- Corte: Algunos prefieren cortarlos en rodajas para facilitar la cocción y evitar que se enreden en la parrilla.
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Marinado (opcional):
- Si deseas potenciar el sabor, puedes marinar los chinchulines en una mezcla de:
- Jugo de limón
- Sal gruesa
- Ajo picado
- Pimienta negra molida
- Otros condimentos a gusto (pimentón dulce, orégano, etc.)
- Deja marinar por al menos 30 minutos, o incluso toda la noche en el refrigerador.
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Cocción:
- Preparación de la parrilla: Prende un fuego vivo y espera que las brasas se cubran de ceniza. La parrilla debe estar bien caliente.
- Colocación: Coloca los chinchulines sobre la parrilla, evitando las brasas directas. Si los cortaste en rodajas, pinchalos en un espetín.
- Cocción:
- Tiempo: Cocínalos por unos 20-30 minutos por cada lado, o hasta que estén dorados y crujientes por fuera.
- Temperatura: La parrilla debe estar a una temperatura alta al principio para sellar los jugos, y luego bajar un poco para terminar la cocción.
- Voltear: Voltéalos con frecuencia para que se cocinen de manera uniforme.
- Sazonamiento: Durante la cocción, puedes rociarlos con más jugo de limón o sal gruesa.
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Consejos adicionales:
- Escaldado: Algunos prefieren escaldar los chinchulines antes de cocinarlos. Para esto, los sumerges en agua hirviendo durante unos segundos.
- Acompañamientos: Los chinchulines suelen disfrutarse solos, pero también combinan muy bien con chimichurri, salsa criolla o limón.
- Temperatura de la parrilla: La clave está en encontrar la temperatura adecuada. Si la parrilla está muy caliente, se quemarán por fuera y quedarán crudos por dentro. Si está muy baja, tardarán mucho en cocinarse y se secarán.
