La falta de publicación en el Boletín Oficial mantiene en suspenso las nuevas alícuotas y condiciona las decisiones comerciales del sector agrícola.
El Gobierno nacional aún no publicó en el Boletín Oficial la baja de retenciones anunciada, y la medida —comunicada el martes— no tiene vigencia legal. Esta situación genera demoras en la liquidación de exportaciones, ya que muchas empresas esperan la actualización del impuesto para mejorar sus márgenes antes de realizar operaciones.
El nuevo esquema contempla reducciones para soja, maíz, trigo, cebada, sorgo, girasol y subproductos, con bajas de entre 1 y 2 puntos porcentuales. La indefinición provoca que el mercado opere con cautela y menor movimiento.
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Según cálculos del sector privado, el costo fiscal de las modificaciones oscila entre US$ 500 y US$ 700 millones, lo que equivale a entre 0,08% y 0,1% del PIB, una presión adicional sobre las cuentas públicas previstas para 2026.
Las alícuotas anunciadas —pero aún no vigentes— son: soja 26% a 24%, subproductos 24,5% a 22,5%, trigo y cebada 9,5% a 7,5%, maíz y sorgo 9,5% a 8,5%, girasol 5,5% a 4,5%. Hasta que se concrete su publicación, el sector continuará en pausa a la espera de certezas regulatorias.
