El centeno en Argentina es un cultivo con una larga tradición, destacándose por su rusticidad y excelente adaptación a suelos pobres, arenosos y a condiciones climáticas adversas, especialmente el frío y la sequía invernal.
Tradicionalmente se ha utilizado como forraje de invierno y, en menor medida, para la producción de grano (para consumo humano o animal), pero en las últimas décadas ha ganado un rol protagónico como Cultivo de Servicio (CS) o de cobertura dentro del esquema de siembra directa.
El centeno (Secale cereale) es considerado el cultivo de servicio (CS) gramínea invernal por excelencia en el corredor agrícola de Argentina debido a su rusticidad, adaptabilidad a suelos pobres o salinos, y su gran capacidad de generar biomasa en poco tiempo. Su uso se ha consolidado como una estrategia clave de sustentabilidad para complementar la siembra directa.
El centeno aporta múltiples servicios ecosistémicos que mejoran la salud y estabilidad del sistema productivo, especialmente en las regiones con riesgo de erosión o problemas de manejo hídrico.
1. Control de la erosión y protección física
- Alta Cobertura: Su rápida implantación y crecimiento en otoño-invierno produce una densa cobertura aérea que supera rápidamente el umbral recomendado para la protección del suelo (generalmente, 60-70%).
- Reducción Cuantificada: Estudios realizados en ambientes semiáridos (como el de San Luis) han confirmado que el centeno puede reducir hasta un 75% la erosión hídrica y un 88% la erosión eólica.
- Estabilización: Actúa como trampa de sedimentos y ancla el rastrojo, minimizando el impacto directo de las gotas de lluvia y la velocidad de la escorrentía, independientemente de la pendiente del terreno.
2. Manejo hídrico y de sales
- Drenaje Biológico: Su consumo de agua ayuda a regular la profundidad de la napa freática en zonas bajas o con exceso hídrico, previniendo encharcamientos.
- Reducción de Salinización: Al reducir la evaporación directa del suelo, el centeno ayuda a evitar el ascenso y la acumulación de sales en la superficie.
- Mejora de la Infiltración: La acción de sus raíces fibrosas contribuye a la generación de macroporosidad, mejorando la infiltración del agua de lluvia, aunque este beneficio puede ser más evidente a largo plazo.
3. Control de Malezas
- Competencia Temprana: Su crecimiento inicial competitivo en otoño le permite disputar eficazmente los recursos (luz, agua, nutrientes) con las malezas invernales (como la rama negra).
- Cobertura Primaveral: La densa cobertura de rastrojo en primavera reduce la emergencia de malezas estivales difíciles (como el yuyo colorado), complementando la acción de los herbicidas.

Principales provincias productoras de centeno
El cultivo de centeno se concentra históricamente y de manera predominante en la región semiárida y subhúmeda de Argentina, donde sus características de resistencia al estrés son más valiosas.
Las provincias con mayor superficie y tradición en la producción de centeno (tanto para forraje/grano como para CS) son:
1. La Pampa
La Pampa es una de las principales productoras de centeno, utilizándolo tanto para la producción de grano como de forraje (verdeo de invierno) para la ganadería.
- Zona Destacada: Las áreas de siembra se concentran en el centro y este de la provincia, como Catriló, Toay, Realicó y General Pico. Su clima semiárido y sus suelos más arenosos hacen que el centeno sea un cultivo más seguro que otros cereales de invierno.
2. Buenos Aires
Principalmente en el suroeste de la provincia de Buenos Aires, las condiciones de suelos y clima seco son ideales para el centeno.
- Zona Destacada: El área de influencia de Bahía Blanca y las zonas más secas del sudoeste utilizan el centeno extensivamente como forraje y cultivo de cobertura. El INTA Bordenave ha desarrollado variedades específicas, como el Centeno Emilio INTA, adaptadas a estas condiciones de frío y sequía.
3. Córdoba
El centeno se cultiva en Córdoba, principalmente en las áreas de transición y en aquellas con problemas de degradación de suelos, donde se ha consolidado su uso como Cultivo de Servicio (CS) para controlar la erosión y mejorar la estructura del suelo antes de la siembra de maíz o soja.
Provincias con uso emergente como Cultivo de Servicio:
Además del núcleo tradicional, el uso del centeno se está expandiendo a otras regiones gracias a su rol como CS:
- San Luis: Es crucial en las zonas semiáridas, como el área cercana a Villa Mercedes, para combatir la erosión hídrica y eólica en suelos frágiles, un uso que ha sido validado por estudios del INTA.
- Otras Provincias: Se registran ensayos y uso del centeno en provincias con interés en cultivos de cobertura, como Santa Fe (en zonas de transición) e incluso en el NEA (Noreste Argentino), aunque en menor medida, buscando alternativas de verdeo de invierno.
Usos principales del centeno en Argentina
- Cultivo de Servicio (CS) o Cobertura: Actualmente es su función más relevante en la agricultura extensiva. Se siembra en otoño/invierno y se seca en primavera para proteger el suelo de la erosión, reducir las malezas, y mejorar el balance hídrico.
- Forraje y Verdeo de Invierno: Se utiliza ampliamente para pastoreo directo o para la confección de reservas (heno o silaje) para la alimentación de ganado bovino, por su rusticidad y la producción de biomasa en invierno.
- Grano: Aunque la producción para grano es menor que la de trigo o cebada, se destina a la industria alimentaria (principalmente para la fabricación de panes integrales y funcionales y panificación especial) y, en menor medida, a la industria de bebidas (cerveza, whisky).





