Los batidos y los smoothies pueden ser una buena opción para incorporar fruta y sobre todo verdura en las comidas de los más pequeños y así beneficiarse de todas las vitaminas y minerales que poseen.
Se viene la temporada cálida, primavera verano, y el calor invita a consumir bebidas ricas y fresquitas… y tentaciones en forma de helados y similares por todas las esquinas. Pero afortunadamente hay alternativas más saludables para no caer en ellas, al menos no a diario.
Las posibilidades son infinitas, basta combinar frutas con leches bajas en grasa y sin azúcares añadidos -las más ricas, o con infusiones de sabor a frutas para hacer batidos fabulosos que podremos hacer aún más refrescantes si usamos fruta congelada o añadimos algunos cubitos de hielo hechos con las infusiones.
Si bien lo ideal es que los chicos incorporen frutas y verduras a conciencia, sabiendo lo que están ingiriendo, una ayudita con estos batidos en los que casi ni se nota la verdura, no vienen mal.
Los batidos de frutas con verduras son ideales para los desayunos de los niños, pero también para dárselos como tentempié, merienda o snack antes de irse a la cama.
Si les añadimos copos de avena o quinoa cocida incluso se les pueden dar a la hora de cenar. También podemos servir los batidos en un bol con un poco de granola u otros cereales, frutos secos y fruta fresca.
Otra opción es congelar estos batidos y ofrecerlos como helados. Son dulces y cremosos, sabores y texturas que pocos niños se resisten probar.
Combinaciones generales para batidos
Para hacer batidos saludables para niños, podemos seguir esta regla general:h
- 1 taza de 250 ml de bebida vegetal, agua, zumo o infusión
- 1-2 piezas de fruta como manzana, naranja, melocotón, mango, piña, albaricoques o un puñado de frutos de bosque
- 1 trozo de verdura
No hay verduras para niños específicas: podemos usar cualquier verdura. Simplemente debemos tener en cuenta qué tipo de verdura es a la hora de introducirla en los batidos:
- La verdura de hoja verde como espinacas, kale, acelgas, canónigos, lechuga o pepino la usaremos en crudo.
- Las verduras más duras como brócoli, calabacín, coliflor, remolacha, calabaza es mejor añadir cocidas, ya que así son más fáciles de digerir. Las podemos cocer al vapor o en olla o incluso en el horno.
La mayoría de los batidos lleva plátano congelado, ya que aporta una textura extra cremosa y endulza sin necesidad de usar azúcar. Lo mejor es tener siempre plátanos en el congelador. Simplemente pelamos los plátanos muy maduros, los cortamos en rodajas y los congelamos.
Si no les gusta a los niños, los podemos sustituir por otra fruta congelada dulce como mango o piña, un par de cucharadas de copos de avena, aguacate o semillas de chía y añadir 1 dátil.
Para que los batidos queden bien frescos, podemos usar verdura o fruta congelada; si no, se pueden añadir un par de trozos de hielo. La fruta la podemos ir congelando a lo largo de año cuando está en temporada.
Para hacer los batidos más saciantes podemos añadir ingredientes ricos en proteína y fibras como frutos secos, semillas o mantequillas de frutos secos, o bien usar yogur o tofu sedoso como base, o añadir copos de avena o incluso garbanzos o alubias blancas cocidas.
También podemos añadir algún superalimento para un extra nutrición como reishi, moringa en polvo, polen, semillas de chía, cáñamo, lino, espirulina o açaí.
Recetas de batidos para niños
Batido goloso de remolacha y frambuesas
Preparación: 10 minutos – Cocción: 30 minutos
Este batido cremoso de un color rosa espectacular tiene un sabor muy suave, es rico en vitaminas como ácido fólico, vitamina C y minerales como manganeso y hierro. Es ideal para los niños que practican mucho deporte.
Es un batido fácil de hacer, lo único que hay que tener en cuenta es que tenemos que cocinar la remolacha antes de utilizarla en la receta. La podemos cocer en agua, al vapor o aún mejor en el horno, que da a este batido un sabor irresistible, porque favorece el dulzor natural de esta verdura preciosa.
Ingredientes (2 batidos):
- 250 ml de yogur
- 1 plátano congelado
- 1/2 remolacha pequeña
- 1 naranja
- 100 g de frambuesas
- 1-2 dátiles
- 2 cubitos de hielo
Preparación:
- Si no utilizas remolachas ya cocidas, pela la remolacha, córtala en trozos y cocínala en una olla con agua y una pizca de sal unos 20 minutos, o bien en el horno, rociada con un poco de aceite, a 200 grados unos 30-40 minutos, hasta que está tierna. Deja enfriar.
- Pela la naranja y corta en trozos.
- Deshuesas los dátiles.
- Combina todos los ingredientes en una batidora potente, tritura y añade más agua o endulzante si es necesario.
Batido lila mágico con arándanos y kale
Preparación: 10 minutos – Cocción: 5 minutos
¿Quién adivinaría que este batido de precioso color lila lleva calabacín? El calabacín congelado añade una textura más cremosa, pero podemos probar con un calabacín crudo si preferimos.
Ingredientes:
- 1 platano congelado
- 150 g de arándanos congelados
- 1/2 calabacín pequeño congelado
- 1 hoja de kale
- 2 cucharadas de anacardos crudos
- una pizca de canela
- 250 ml de bebida de coco
- 1 cucharada de sirope de arce (opcional)
Preparación:
- Corta el calabacín en trozos, cocina al vapor unos 5 minutos, deja enfriar y congela.
- En el momento de servir tritura todos los ingredientes. Prueba el sabor y sirve.
Batido de calabaza y mango
Preparación: 10 minutos – Cocción: 45 minutos
Un batido que sabe a otoño. Es rico en vitamina C y betacarotenos, necesarios para la piel y la vista y para un sistema inmune fuerte, justo lo que los peques necesitan en la temporada de gripes.
Ingredientes (2 batidos):
- 250 ml de puré de calabaza cacahuete
- 1 mango
- 1 cucharada de sirope de arce (opcional)
- 250 ml de bebida vegetal
- un par cubos de hielo
- una pizca de canela
Preparación:
- Lo mejor es hacer una entera calabaza cacahuete al horno. Simplemente corta la calabaza por la mitad a lo largo con la piel, quita las semillas, unta con un poco de aceite, sazona con sal y cocina al horno a 180 grados unos 45 minutos hasta que está tierna.
- Deja enfriar la calabaza y, con ayuda de una cucharada, reserva la pulpa. La puedes usar para hacer repostería, salsas, añadir a hummus o hacer este batido.
- Para hacer el batido pela el mango y córtalo en trozos.
- Añade todos los ingredientes a una batidora potente y tritura.
- Prueba el sabor y añade más endulzante si prefieres.
Batido rosa de fresas y coliflor
Preparación: 10 minutos – Cocción 10 minutos
Las verduras crucíferas son muy beneficiosas para los más pequeños, ya que contienen muchos fitonutrientes y vitaminas y la coliflor es una de las verduras más saludables pero una de menos preferidas de muchos peques. La verdad es que a la hora de cocinarla, tiene un olor un poco fuerte. Pero, al prepararla en esta manera, los pequeños ni se dan cuenta del ingrediente de su batido de color rosa tan bonito.
Para preparar el batido usamos la coliflor cocida, que es más fácil de digerir.
Ingredientes (2 batidos):
- 250 g de coliflor
- 150 g de fresas
- 1 plátano congelado
- 1 cucharada de semillas de cáñamo
- 350 ml de bebida vegetal
- 1 dátil
- un par cubos de hielo
Preparación:
- Corta la coliflor en ramilletes y cuece al vapor hasta que está blanda, unos 10 minutos. Deja enfriar.
- Quita la parte verde de las fresas y cortalas por la mitad. Deshuesa el dátil.
- En una batidora de vaso potente tritura todos los ingredientes.
- Comprueba el sabor y añade un poco de endulzante, si prefieres. Añade más bebida vegetal si quieres.
También puedes preparar la coliflor con antelación y dejarla congelada para cuando la vayas a utilizar y así necesitarás menos tiempo.
Batido de chocolate y avellanas y un poco de espinacas
Preparación: 5 minutos
Este batido de chocolate sabe como la crema de chocolate y avellana más popular del mundo y gustará incluso a todos los que “odian” las verduras.
Ingredientes (2 raciones):
- 4 cucharadas de copos de avena trituradas hasta harina
- 1-2 dátil medjoul
- 250 ml de bebida vegetal
- 60 g de espinacas
- 1 cucharadita de cacao en polvo
- 1 cucharada de mantequilla de avellanas
- 2 cubos de hielo
Preparación:
- En una batidora de vaso potente tritura todos los ingredientes hasta que tenga una textura suave. Empieza con 1 dátil. Prueba el sabor y añade otro dátil si prefieres.
- Añade más líquido si te hace falta.