Para mantener controlado el riesgo fitosanitario durante los meses más cálidos, los especialistas del INTA enfatizan la necesidad de continuar con los controles.
La chicharrita del maíz (Dalbulus maidis) es un desafío sanitario clave para la producción maicera en Argentina, debido a su rol como vector del achaparramiento del maíz (una enfermedad causada por el Spiroplasma).
A pesar del brote significativo en la campaña 2023/2024, los informes más recientes (septiembre/octubre de 2025) señalan una baja incidencia del insecto en gran parte del país de cara a la nueva siembra. Sin embargo, los especialistas insisten en mantener un manejo integrado y preventivo riguroso.
Según la red de monitoreo del INTA, a septiembre de 2025, las poblaciones de la chicharrita del maíz (Dalbulus maidis), vector clave del achaparramiento, se encuentran en niveles bajos en la mayoría de las principales regiones productoras del país. Esta información, resultado de un seguimiento sistemático, es considerada una buena noticia para el cultivo.
Situación actual y cifras regionales
El informe técnico del INTA destaca que los niveles poblacionales detectados a mediados de septiembre «no revisten, por el momento, riesgo fitosanitario», gracias en parte a un control natural.
- Factores a favor: Los especialistas atribuyen este descenso natural a las bajas temperaturas invernales, que limitaron el crecimiento poblacional del insecto.
- Registros de Monitoreo (bajos y puntuales):
- Formosa y Tucumán (en rastrojo): Apenas 2 chicharritas en 160 golpes de red.
- Norte de Santa Fe: 2 adultos en 100 plantas de maíz (estado V4).
- Entre Ríos (en verdeo invernal): Solo 1 insecto cada 160 golpes de red.
- Excepción en Chaco: La situación fue diferente. El bajo número de heladas y las abundantes lluvias invernales crearon un escenario propicio, favoreciendo el desarrollo de maíces voluntarios y el incremento de la superficie sembrada, lo que podría aumentar el riesgo local.

Énfasis en el manejo integral y la capacitación
A pesar de la baja incidencia actual, el INTA insiste en no confiarse y subraya la necesidad de sostener las buenas prácticas para prevenir futuros brotes.
El organismo resalta que el manejo de la chicharrita requiere un abordaje integral y coordinado a largo plazo, combinando de forma equilibrada medidas culturales, genéticas y químicas. La prevención y el manejo integrado son la mejor defensa para el maíz argentino.
Para reforzar estas pautas, el INTA organiza el webinar virtual gratuito “Chicharrita del maíz: situación actual y pautas de manejo” el próximo 9 de octubre. Se invita a productores, asesores y técnicos a seguir la transmisión por el Canal de YouTube del INTA Reconquista para actualizarse sobre los últimos resultados de la red de monitoreo y las mejores prácticas de manejo.