Mientras que los días fríos del otoño y el invierno pueden dejar heladas, existe otro fenómeno asociado al congelamiento que también puede aparecer. ¿De qué se trata?.
Durante los amaneceres y las noches frías, para que se forme la escarcha la temperatura del aire debe de ser inferior a 0ºC, cuando la superficie donde se forma ese depósito de hielo está muy fría, como ocurre, por ejemplo, con la carrocería de un vehículo, puede llegar a formarse una capa de escarcha sin llegar a helar. Cuando el frío se afianza en noches despejadas, aparece el congelamiento de la superficie, lo que se debe a la formación de escarcha.
Este fenómeno meteorológico se produce una vez que la temperatura desciende por debajo de 0 ºC, o sea, bajo el punto de congelación. En este caso, el vapor de agua que se concentra sobre la cubierta vegetal, debido a la evapotranspiración, se convierte en hielo, depositándose sobre los distintos elementos del terreno.
La curiosa forma que puede adoptar la escarcha sobre una superficie, varia, dependiendo la intensidad del aire frio circundante y el contenido de agua sobre la base del mismo terreno, planta u objeto. En muchos casos, la forma que adopta se asemeja a pequeñas agujas puntiagudas, pequeños cristales hexagonales o cristales de hielo uniformes.
Uno de los ejemplos más comunes, son la de la escarcha en autos, que se dan sobre superficies particularmente frías, como el metal de la carrocería de un vehículo o sus lunetas, se puede llegar a formar escarcha, aunque la temperatura del aire no quede por debajo del punto de congelación, por este motivo se la conoce como escarcha sin helar.
Las heladas tradicionales Cuando la temperatura desciende por debajo de los 0 ºC, con el descenso libre del aire frío, a causa de cielo despejado, se generan las heladas. El congelamiento en la superficie que se produce con la presencia de pequeños cristales hexagonales que se adhieren sobre la hierba, plantas, frutos, hojas, coches, dándole un aspecto blanquecino, de ahí el nombre de heladas blancas, una de las más comunes en épocas de invierno.
Las heladas negras son las más peligrosas y a la vez las temidas por los agricultores. Aparecen cuando el mercurio baja igualmente de los cero grados, pero no se forma escarcha, ya que la humedad ambiental es muy baja. El aire es tan seco que no existe condensación.
Como no hay capa de hielo sobre las plantas, no hay protección y, por tanto, este frío seco actúa directamente sobre la estructura molecular de las plantas, destruyendo todo el tejido interno y produciendo ese típico color negruzco, mortal para cualquier clase de cultivo. Y las heladas tardías, que son las que aparecen entre la última parte del invierno y en los meses de primavera, entre octubre y noviembre.
Estas heladas a destiempo se producen por los pasos de frentes fríos fuerte de época. Se conocen como heladas agrometeorológicas, por que suelen producirse sin que el mercurio del termómetro descienda por debajo de los 0ºC