En tiempos con importantes precipitaciones, el exceso de agua puede resultar un serio inconveniente, pero para poder afrontarlos existen los desagüe francés. En esta nota te contamos de que se trata y como armarlo en casa.
En época con lluvias recurrentes, donde suceden eventos de importante descarga de agua desde las nubes, la saturación de suelos en patios, jardines y huertas suele representar un inconveniente. La acumulación de agua, saturación de drenajes y los encharcamientos son un dolor de cabeza para jardineros y huerteros en si.
En esta oportunidad vamos a iniciar lo que sería un breve tutorial para que puedas preparar en casa un drenaje francés. Este sistema tiene muchos nombres y estilos diferentes: baldosas de drenaje, drenaje de roca, drenaje de zanja, entre otros. Este sistema de drenaje es una alternativa muy útil, ya que canaliza el agua lejos de su casa, actuando como un sistema de drenaje expuesto para su jardín o huerta ecológica.
Lo cierto es que armar un desagüe francés es muy simple, puedes hacerlo tu mismo con algunos elementos y tener buenos resultados. Este tipo de desagüe consiste en una zanja que se rellena con grava y luego se rodea con una especie de tela de jardinería.
Un desagüe francés se crea en forma de zanja ligeramente inclinada, esta, repleta de granito triturado (grancilla). Este desagüe logra que el agua que queda en la superficie fluya hacia la zanja donde se mueve mediante el granito triturado hacia un punto de salida que puede ser un canal, un pozo seco o un área de drenaje.
Instrucciones para el armado del «desagüe francés»
- Como primer paso, deberás detectar y analizar las áreas propensas a inundaciones en tu jardín, patio o huerta, este punto es muy importante, ya que sirve para saber dónde se ubicará la zanja del desagüe francés y hacia dónde irá el agua.
- Algo más para tener en cuenta, es confirmar que el drenaje de tu jardín no sea perjudicial para el terreno de tus vecinos o áreas publicas que puedan ocasionarte problemas.
- El desagüe francés debe estar inclinado para que el agua llegue al punto de salida. Se aconseja crear una pendiente de 30 cm por cada 20 o 30 metros de largo.
- Comprueba la pendiente natural clavando una estaca al principio y otra al final de la zanja. Ata un hilo de albañilería a una de las estacas y después pásalo a la otra estaca y ata sin apretar. Ajusta la profundidad de la zanja según se necesite para crear la pendiente apropiada.
- Comienza a cavar la zanja para que la misma tenga un ancho de 15 cm o más.
- Haz la zanja tan profunda como desees. Por ejemplo, una zanja de 15 metros de largo podría tener 25 cm de profundidad en el extremo inicial y 40 cm de profundidad en el punto de salida.
- Cubre la zanja con tela de paisajismo y asegura los extremos con grapas para tela clavadas en el suelo con ayuda de un martillo.
- Llena la zanja con granito triturado y rastrilla para que quede uniforme con la parte superior de la zanja.
Con información de: https://www.hagaloustedmismo.cl/