El solsticio de invierno coincide con el inicio de la estación más fría del año y destaca por ser el día más corto y la noche más extensa.

Poco a poco los días se tornaron más cortos y la noches más largas, o sea, las horas de luz se vieron acotadas en los últimos meses. Además las temperaturas bajas ganaron protagonismo y las helada, la nieve cubren gran parte. Las temperaturas bajo cero ganan terreno desde la Patagonia al centro del país. Momento de lucir los abrigos más gruesos.

En esta jornada se produce el Solsticio de junio, el fenómeno que nos deja el día más corto del año y la noche más larga. Esto se debe a que el sol alcanzará una menor altura en el horizonte, por lo que son menos las horas de luz y más bajas las temperaturas. Y con el solsticio empieza la nueva estación: el invierno.

¿Cómo se produce el cambio de estación?

La órbita de la tierra es elíptica, por lo que tiene eje mayor y menor. Sin embargo, lo que origina las estaciones es la inclinación del eje y no la cercanía o lejanía del sol. Si esto no ocurriera, sería invierno o verano al mismo tiempo tanto en el hemisferio norte como en el sur.

¿Cuándo empieza el invierno 2023 en Argentina?

El inicio de las estaciones varía en función del año. En el hemisferio sur comienza con el solsticio de invierno (las fechas varían entre el 21 y el 22 de junio).

Si te estás preguntando cuándo empieza el invierno 2023 en Argentina debes saber pero este año el solsticio de junio se producirá este día jueves 20 de junio a las 17:51 hs el hemisferio sur, momento en que se empezará a transitar la estación oficial del invierno. Este finalizará el jueves 21 de septiembre con la entrada de la primavera.

Solsticio de invierno, el día más corto del año

El solsticio de invierno coincide con el inicio de la estación que da su nombre, y destaca por ser el día más corto del año (al mediodía el sol alcanza el punto más bajo de todo el año). Desde ese momento los días son cada vez más largos y ganamos horas de luz. ¡Buena noticia para los amantes del aire libre!

Los Solsticios tienen gran importancia astronómicamente porque el Sol alcanza su máxima declinación norte y máxima declinación sur con respecto al ecuador terrestre. Esta situación tiene lugar dos veces al año: en junio y diciembre.