Existen muchas variedades de aceites para cocinar, pero no todos son buenos. En esta nota te dejamos el listado de los mejores y más saludables para emplear con tus alimentos diarios.
Para volverte un experto en aceites buenos y saludables, esta nota es para vos. A continuación podrás conocer cuáles son los aceites más recomendables para su uso diario en la cocina, sus propiedades y características que lo hacen mejores y con buenos aportes para la salud.
Para dar comienzo a la nota, debes saber que el aceite es una grasa de origen vegetal en estado líquido. Muchos piensan que un aceite vegetal por ser aceite ya es sinónimo de «grasa» y esto es igual a «malo o dañino» pero en realidad no es tanto así.
La realidad es que si hay manera más saludable de comer y también podemos mantener el uso de ciertos ingredientes, sin necesidad de sacarlos del medio, es conocer como están compuestos y que al igual que otros alimentos aportan bondades a nuestro organismo. Es por eso que compilamos los 10 mejores aceites para que puedas utilizar en la cocina de casa:
Aceite de oliva virgen extra
Uno de los más populares es el aceite de oliva virgen extra rico, con sabor ligeramente picante (que consiste principalmente en grasas monoinsaturadas) está mínimamente procesado, por lo que retiene niveles extremadamente altos de antioxidantes, incluida la vitamina E. Con su consumo tiende a reducir la inflamación en el cuerpo con el tiempo.
Aceite de palta
El aceite de palta está cargado de grasas monoinsaturadas, del tipo que se considera bueno para el corazón por ser regulador de los niveles de colesterol. Este aceite de fruta también proporciona luteína, un antioxidante que mejora la salud ocular.
Aceite de cáñamo
Uno de los menos conocidos pero con propiedades muy buenas. Este aceite de sabor terroso extraído de semillas de cáñamo abunda en ácidos grasos esenciales como el ácido alfa-linolénico omega-3. Su consumo puede mejorar la salud de la piel al reducir afecciones como la aspereza y la sequedad.
Aceite de coco
El aceite de coco es uno de los mejores que se pueden consumir, por sus propiedades. Este aceite es rico en grasas saturadas saludables y antioxidantes. También promueve la salud del cerebro, aumenta la inmunidad y fortalece la función tiroidea. Aporta a la digestión y asimilación adecuadas de las grasas, además de aumentar los niveles de energía corporal.
Aceite de palma rojo
Este aceite está mezclado con antioxidantes, incluida la vitamina E y carotenoides como el betacaroteno y el alfacaroteno. En el cuerpo, el betacaroteno se puede convertir en vitamina A, que se utiliza para promover la salud de los ojos, los huesos y el sistema inmunológico. También su consumo puede prevenir enfermedades del corazón.
Aceite de semilla de uva
El aceite a base de semilla de uva tiene un sabor neutro y ligero, y es una buena fuente de vitamina E y ácido oleico, una grasa que puede ayudar a reducir el riesgo de accidente cerebrovascular hasta en un 73%, según estudios. También ayuda a regular el apetito, calmando la ansiedad de consumo excesivo.
Aceite de sésamo
El aceite de sésamo también es rico en hierro, calcio y magnesio, el último de los cuales es conocido por su increíble efecto calmante. También es muy recomendable por que reduce la presión arterial y reduce el riesgo de enfermedades cardíacas. El consumo periódico de este aceite ayuda a contribuir a la agudeza cognitiva, la absorción adecuada de grasas, un menor riesgo de enfermedades cardíacas, una piel sana y dientes y huesos fuertes.
Aceite de linaza
Otro alimento muy bueno para su uso diario en las comidas. El aceite de linaza es una fuente rica en ácidos grasos omega-3, un tipo de grasa poliinsaturada. Este aceite proviene de la semilla de la planta de lino. De hecho, contiene más omega-3 que reducen la inflamación que el aceite de pescado y es una de las pocas fuentes vegetarianas del nutriente. Su consumo alivia el dolor en las articulaciones y puede aliviar el asma inducida por el ejercicio.
Aceite de almendras
Sin lugar a dudas, uno de los más recomendados por los nutricionistas para emplear en ciertas dietas. El aceite de almendras tiene un suave sabor a nuez y un tono amarillo pálido. Elaborado al extraer el aceite de la pasta de almendras molida. Contiene grasas monoinsaturadas (como aceite de oliva y palta), vitamina E y fitoesteroles, compuestos vegetales ideales para mejorar los niveles de colesterol y mejora la piel.
Aceite de nuez
El aceite de nuez es una de las pocas fuentes vegetales concentradas de ácidos grasos omega-3. Su consumo ayuda a reducir los niveles de colesterol y la respuesta biológica del cuerpo al estrés. El aceite de nuez puede ayudar a frenar las enfermedades cardíacas a largo plazo.
Con información: https://yoelijocuidarme.es