El INTA está llevando a cabo ensayos con productores para incrementar la eficiencia del riego en cultivos que consumen mucha agua. Lo más relevante es que este sistema incorpora la fertilización al proceso de riego, lo que constituye una oportunidad clave para el manejo de precisión.
En la región de Traslasierra, Córdoba, el cultivo de papa se enfrenta a una creciente escasez hídrica, producto de la disminución de lluvias y la limitada eficiencia de los métodos de riego tradicionales (por surcos y pivote). Esta situación motivó al INTA Villa Dolores a impulsar la adopción del riego por goteo subterráneo como una alternativa viable y sostenible.
“El riego es un factor clave en nuestra región”, enfatizó Silvana Walter, jefa de la Agencia de Extensión Rural del INTA Villa Dolores, señalando la baja eficiencia del riego por surcos (que alcanza apenas un 40% de uso del agua).
Un salto en la eficiencia del agua
El goteo subterráneo se presenta como una tecnología disruptiva, capaz de triplicar la eficiencia hídrica. «Si se compara una hectárea regada por goteo y una por surco, con la misma cantidad de agua se podría regar tres veces más”, explicó Walter.
Esta innovación ya se está probando en campos de productores de la zona (alrededor de Villa Dolores, Los Cerillos y San José), buscando soluciones para un cultivo que demanda entre 500 y 800 mm de agua en sus ciclos productivos (tardío y semitemprano).
Beneficios clave del nuevo sistema
- Ahorro y Sencillez Operativa: La operación es mucho más simple y rápida que el riego por surcos (que puede durar más de 24 horas y es manual), además de eliminar costos de limpieza de acequias.
- Fertirriego y Precisión: Permite integrar la fertilización con el riego, aplicando los nutrientes de manera más eficiente y precisa según la demanda del cultivo, un paso hacia el manejo de precisión.
- Adaptación a las Labores Agrícolas: Las pruebas locales confirmaron que la instalación de los laterales de riego entre 35 y 40 cm de profundidad no interfiere con la maquinaria de laboreo ni con la cosecha mecánica (con el «peludo o arrancador»). Además, se verificó que el agua asciende correctamente por capilaridad, adaptándose a los suelos de Traslasierra.
- Regulación a Demanda: Permite a los productores regular la frecuencia y cantidad de agua según la necesidad real del cultivo y no en función de la disponibilidad coordinada con el consorcio.
Resultados productivos prometedores
Dos experiencias prácticas acompañadas por el INTA (agosto-diciembre 2024 y febrero-junio 2025) confirmaron el potencial del sistema. El caso de Antonio Martínez, asesorado por la empresa Argeswater SRL en San José, es un claro ejemplo:
En seis hectáreas de papa con goteo enterrado, se proyecta alcanzar una producción de alrededor de 33 toneladas por hectárea, lo que representa un diferencial de rendimiento de entre 20 y 30% en comparación con las parcelas sin esta tecnología.
Según César Díaz Nicotra, ingeniero de Argeswater, el goteo subterráneo optimizó la fertilización y potenció la capacidad productiva del cultivo. Ante estos resultados, la empresa decidió ampliar la superficie de riego a 25 hectáreas.

Inversión a largo plazo
Aunque la implementación requiere una inversión inicial significativa (incluyendo la impermeabilización de represas y la instalación de equipos de bombeo y filtrado), el INTA lo considera una inversión a largo plazo crucial en un contexto de escasez. Se estima que la tecnología tiene una vida útil de 12 a 15 años.
El éxito de estas experiencias resalta la importancia de la articulación público-privada (INTA – productores – empresas) para adaptar la tecnología, medir variables locales y planificar el manejo del agua y los nutrientes.
Con información de: https://www.argentina.gob.ar/




