En esta nota te contaremos sencillos trucos dejarás de preguntarte de una vez por todas cómo mantener la fruta fresca para disfrutar de todo su sabor, incluso en días calurosos.
Llegan las temperaturas elevadas y a la hora de mantener la fruta fresca en verano puede ser una misión casi imposible, teniendo en cuenta que existen variedades que son muy frágiles a la exposición al ambiente no solo caluroso, también húmedo.
El ambiente en torno a los alimentos naturales cumple un papel fundamental, teniendo en cuenta que en combinación de las altas temperaturas, la humedad y el calor ambiente acumulado en recipientes con fruta, ya sea cortada o no, hacen que se maduren y se oxiden con mayor rapidez. Este proceso repentino y abrupto hace que cambie su aroma y textura en tiempo récord.
Hay que tener en cuenta que con la llegada de la temporada de más calor, el consumo de frutas frescas aumenta, por ese motivo vamos más seguido a la verdulería y al mercado a adquirir los alimentos. Por eso, es necesario saber cómo conservar las frutas y verduras para mantenerlas en óptimas condiciones para su consumo, además, el desafío es cómo determinar la frescura de algunos vegetales para asegurarnos que los alimentos estén en buenas condiciones la mayor parte del tiempo posible.
La verdad es que conservar las frutas y verduras frescas no es tarea fácil y podemos encontrarnos con la sorpresa al abrir la heladera y encontrarnos con ese producto que pensamos que iba a durar, en mal estado.
Muchas veces, pese a que pensamos que lo estamos haciendo bien las cosas y no. A continuación te vamos a brindar algunas claves de cómo conservar correctamente las frutas y verduras en época de más calor.
Te puede interesar: El almacenamiento de alimentos en la heladera y prevención de enfermedades
Como primer paso y uno de los más importantes, es guardar las frutas separadas y no mezcladas debido a que cada tipo de vegetal tiene su propio proceso de maduración, y al no mezclar unas frutas con otras no se corre el riesgo de que las de maduración más rápida echen a perder el resto.
Otro de los puntos a tener en cuenta, es que aunque la mayoría de las frutas y verduras necesitan ser conservada en frío, ya sea en frezzer o la heladera durante los meses de más calor, no es aplicable a todas. Las cebollas, ajos y tomates, se conservan mejor fuera de la heladera, pero debe ser un lugar fresco, seco y oscuro.
Un aspecto importante es a la hora de consumirlas ya que se recomienda sacar los alimentos de la heladera unos minutos antes para que tome temperatura ambiente y recupere todas sus características de sabor.
Seguir leyendo: La manipulación y seguridad de alimentos en conservas tradicionales
Cómo determinar la frescura de algunos vegetales
– Acelga: las hojas deben estar sanas, turgentes, de color verde intenso.
– Espinaca: al igual que la acelga, las hojas deben ser suaves y tener color verde oscuro y uniforme.
– Coliflor: sus flores deben ser blancas, sin manchas, firmes y compactas. Las hojas deben ser color verde claro, no estar marchitas y no deben tener olor.
– Remolacha: debe tener raíces uniformes, piel lisa y suave, y estar turgentes sin manchas ni rajaduras. Sus hojas deben estar sanas y tener buena coloración.
– Brócoli: sus flores deben estar cerradas, de color verde azulado, sin manchas ni partes amarillas y sus tallos deben estar firmes.
–Ají morrón: piel brillante, coloreada, sin manchas, con paredes carnosas y gruesas, son rajadura.
– Zapallito verde: piel verde, brillante, consistencia firme, sin manchas, cicatrices ni rajaduras.