Durante el Simposio Fertilidad 2025 en Rosario, expertos advirtieron que la degradación del suelo no solo impacta en la producción agropecuaria, sino también en la salud pública a través de alimentos cada vez menos nutritivos.
El investigador de FAUBA, Miguel Taboada, llamó a “superar la lógica de la productividad” al analizar el deterioro de los suelos. Aseguró que la pérdida de nutrientes en el campo se traduce en una menor calidad nutricional de los alimentos, lo que afecta directamente la salud humana.
Durante el panel “Una salud: nutriendo suelos, cultivos y personas”, se expuso cómo factores como la erosión, los desbalances de nutrientes y el uso excesivo de pesticidas provocan la pérdida de micronutrientes esenciales como el zinc. “Muchos cultivos han perdido entre 9% y 38% de sus nutrientes esenciales en las últimas décadas”, alertó Taboada.
Por su parte, Ana Posas, de la FAO, subrayó que “el 95% de los alimentos que consumimos depende del suelo” y advirtió sobre la “hambre oculta”: una forma de malnutrición que afecta a más de 2.000 millones de personas, con dietas que aportan calorías pero no nutrientes esenciales como hierro o vitamina A.
Ante este escenario, los especialistas coincidieron en la necesidad de adoptar prácticas sostenibles, como la biofortificación, el uso responsable de fertilizantes y la medición periódica de suelos, en el marco de una agricultura sensible a la nutrición que priorice el valor nutritivo de los cultivos más allá del rendimiento.
Fuente: Infocampo.com