Si eres de los que incluye verduras en los zumos, la pulpa sobrante te puede servir para preparar algunos platos salados, con la frutas, dulces. Hasta cosméticos. ¿Lo sabías?
Los zumos y licuados han llegado a nuestras vidas para quedarse. Una gran noticia para nuestra alimentación, que se ve reforzada con vitaminas y minerales supernutritivos. ¿Quién no ha oído hablar del detox? Estas bebidas no solo nos refrescan y nos quitan la sed, algo que nos viene especialmente bien cuando empieza la temporada de calor, sino que también son depurativas. Para prepararlos, nada mejor que los extractores y licuadoras, cuyas funciones consiguen que el proceso sea muy sencillo, además de que aproveches al máximo toda la fruta y verdura.
Caer en la tentación de darse un capricho dulce es mucho más saludable si está elaborado en casa y con ingredientes vegetales. Así, la pulpa de los zumos de frutas, como el de manzana, pepino y kiwi, puede emplearse para hacer un suculento bizcocho. Otras frutas y verduras muy versátiles para los postres son el coco, la zanahoria…
Si te gustan los zumos de verduras, como el de aguacate, apio y manzana, la pulpa sobrante de estas preparaciones se puede emplear en recetas saladas. Las hamburguesas vegetarianas y los hojaldres rellenos admiten muy bien este tipo de ‘sobrantes’.
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Numerosos uso de la pulpa de zumo
Hoy hablamos de las formas de usar la pulpa de zumo sobrante. Así podemos reducir el desperdicio de alimentos y hacer algo igualmente delicioso con estas ideas para utilizar la pulpa rica en fibra.
Una de las preguntas que más se hacen sobre los zumos es “¿Qué puedo hacer con la pulpa del zumo?”. ¡Un montón de cosas! Hoy conocemos 20 de mis usos favoritos para la pulpa de zumo sobrante, inspírate para reducir el desperdicio de alimentos y hacer un uso fantástico de la fibra saludable.
El compostaje es una opción obvia, pero existen otras opciones para usar la pulpa de los zumos. Por suerte, hemos descubierto muchas recetas y métodos únicos a lo largo de los años.
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1. Caldo para sopa.
Si nunca has hecho tu propio caldo, ¡esta es tu oportunidad! Nos encanta hacer nuestro propio caldo durante todo el año, ¡y la pulpa de nuestro zumo juega un papel importante!
Puedes usar la pulpa fresca o congelada para esta receta, sólo asegúrate de que se ha descongelado antes de cocinar. Nos encanta hacer nuestro propio caldo de verduras – la pulpa añade un gran sabor y algunos beneficios adicionales para la salud.
Este caldo casero se puede usar como base para cualquiera de tus sopas y guisos favoritos, ¡o puedes disfrutarlo solo! Todo lo que necesitas es pulpa de verduras, agua, sal, pimienta y tus especias favoritas.
Receta de Caldo de Verduras.
- Vierte 9-10 tazas de agua en una olla grande y comienza a hervir.
- Una vez hirviendo, añade toda la pulpa de verduras que tengas.
- Añade la sal, la pimienta y otras especias al gusto.
- Una vez añadidos todos los ingredientes, reduzca a fuego lento y cocine de 45 minutos a 1 hora.
- Deje que se enfríe un poco.
- Cuele la pulpa restante o déjela en el caldo, ¡tú decides!
- Guárdalo en la nevera hasta 5 días y en el congelador hasta 3 meses.
2. Receta de pesto de albahaca vegano.
Aquí utilizamos la pulpa sobrante de la leche de almendras prensada en frío para hacer un pesto de albahaca vegano.
Este pesto se conservará en la nevera durante una semana aproximadamente.
Ingredientes:
- Pulpa de leche de nueces: sobrante de la leche de nueces prensada en frío.
- Aceite de oliva (virgen extra): 8 cucharadas soperas.
- Ajo (pelado): 12 dientes.
- Espinacas: 70 gramos.
- Albahaca: 70 gramos.
- Zumo de limón: 1/3 de limón mediano.
- Sal: 1 cucharada.
- Pimienta negra (molida): al gusto.
Receta:
- En una cacerola, añade el ajo pelado y cúbrelo con aceite; te recomiendo que uses una cacerola pequeña y poco profunda para evitar que necesites demasiado aceite para cubrir el ajo por completo. Ajustar el fuego para que hierva ligeramente durante 15-20 minutos hasta que el ajo esté ligeramente dorado y tierno.
- Saca el ajo del aceite y deja que tanto el ajo como el aceite se enfríen.
- Añade todos los ingredientes excepto el aceite en la batidora y bate hasta que estén bien mezclados.
- Añade poco a poco el aceite.
3. Galletas de pulpa cruda.
Entendemos que las galletas de pulpa de zumo pueden no sonar demasiado apetitosas al principio, pero estas galletas veganas y sin gluten están destinadas a ser un éxito en su próximo evento o reunión. Son duraderas y se pueden meter en cualquier salsa como el humus, el guacamole o la salsa de espinacas.
Son un tentempié perfecto para aquellos con alergias o intolerancias, o para aquellos que quieren un bocado limpio y saludable. Puede utilizar cualquier pulpa de verduras que le guste, pero nosotros preferimos utilizar pulpa de zanahoria.
Ingredientes.
- 2 tazas de pulpa de zumo de zanahoria.
- ¼ de taza de semillas de lino molidas.
- 1 cucharada de semillas de chía.
- ¼ taza de harina de quinoa.
- ½ cucharadita de sal marina.
- ½ taza de agua.
- Semillas de sésamo.
Receta.
- Lo primero que necesitas es la pulpa del zumo. No tiene que ser sólo zumo de zanahoria. Supongo que la pulpa de zumo de remolacha también funcionaría bien. Pero sólo he probado la receta con zanahorias. Necesitarás unas 2 tazas de pulpa.
- Añade las 2 tazas de pulpa a un bol para mezclar junto con 1/4 de taza de semillas de lino molidas, 1 cucharada de semillas de chía, 1/4 de taza de harina de quinoa y 1/2 cucharadita de sal. Para mantener la frescura, ten a mano semillas de lino enteras y sólo las muelo en el molinillo de café. Se puede usar cualquier harina, o probablemente se podría omitir ya que las semillas de lino y chía deberían aglutinar los ingredientes.
- Mezcla los ingredientes de forma que la pulpa de zanahoria quede bien cubierta por la harina de quinoa. A continuación, déjalo reposar durante unos 5 minutos. Esto es para que la flor de quinoa absorba el líquido de la pulpa de zanahoria.
- Aquí es donde las cosas se ponen un poco complicadas. Dependiendo de tu exprimidor y de lo frescas que sean tus zanahorias, tendrás que improvisar a la hora de añadir el agua. Añade la mitad del agua, es decir, 1/4 de taza, y mézclalo todo. Si consigues formar una bola y que se pegue, ya está lista. La masa no debe ser pegajosa, pero tampoco debe deshacerse. Si necesitas más agua, añade 1 cucharadita cada vez hasta obtener el resultado deseado.
- Deja que la masa repose un poco y luego dale forma de disco. Colócalo sobre papel de pergamino, pon otro trozo encima y extiende la masa hasta que tenga un grosor de 3 milímetros. Puedes ajustar el grosor en función del tipo de galleta que quieras. Si lo haces muy fino, puedes crear crujientes para usar en una ensalada.
- Espolvorea la parte superior con semillas de chía y sésamo, usa el papel pergamino para presionar las semillas en la masa. Toma un cortador de pizza y corta la masa en trozos del tamaño de las galletas.
- Coloca la masa, todavía en el papel, en una bandeja para hornear y hornea durante unos 40 minutos a 175ºC. Tendrás que ajustar esto también en función de la humedad de tus zanahorias. Las galletas están listas cuando al presionarlas ya no ceden. A medida que las galletas se hornean, se encogen y se separan.
- ¡Disfruta!
4. Productos horneados.
Si añades la pulpa de tu exprimidor a los productos horneados, añadirás humedad a tus recetas favoritas. En algunos casos, puedes incluso reducir la cantidad de aceite de oliva o mantequilla, usando una alternativa más saludable y dando un buen uso a la pulpa.
Algunas de las recetas en las que puedes usar pulpa del exprimidor incluyen panes, magdalenas, galletas y muchas más.
5. Batidos.
Si añades la pulpa sobrante a los batidos, tendrás un aporte adicional de nutrientes y fibra. La pulpa también ayudará a espesar el batido, creando una deliciosa consistencia.
Experimentar es una de las mejores partes de los zumos, ¿verdad? Diviértete y juega con diferentes combinaciones hasta encontrar la que más te guste, ¡incluso podrías encontrar tu nueva receta favorita!
6. Desayunos.
Si quieres hacer un revuelto perfecto para tu desayuno, una sartén, buñuelos o patatas, echa unas cucharadas de la pulpa de tu exprimidor para añadir más sabor. Puedes preparar fácilmente un desayuno lleno de nutrientes en cuestión de minutos.
7. Pulpa deshidratada.
La fruta deshidratada es un dulce delicioso. Puedes hacer fácilmente tu propia fruta deshidratada usando la pulpa de la fruta fresca. Así es como se hace:
- Forra una bandeja para galletas con papel encerado.
- Presiona y coloca tu pulpa de fruta de manera uniforme – asegúrate de que todo esté parejo para que se seque de manera uniforme.
- Colócalo en un deshidratador o en la parte más baja de tu horno (preferiblemente alrededor de 115ºC) durante 12-14 horas.
- Corta en tiras y disfruta.
También puedes mezclar zumo de limón y/o azúcar (dependiendo del dulzor de tu fruta) con la pulpa de fruta para conseguir una textura más fina y un sabor más dulce.
8. Polos.
Usando la pulpa que te sobra, puedes preparar una deliciosa golosina.
- Prepara tu zumo favorito y reserva un poco para tus polos.
- Espolvorea un poco de la pulpa del exprimidor en tus moldes de polos.
- Vierte el zumo en los moldes.
- ¡Congela y disfruta!
Hay decenas de sabores diferentes con los que puedes probar.
9. Colorantes naturales comestibles.
Puedes usar la pulpa sobrante para para hacer colorantes comestibles de distintos colores, amarillo, verde, rojo, púrpura, naranja y azul de forma natural. Así podrás disfrutar de tus postres favoritos, sin que afecte a tu salud. Aquí puedes consultar las instrucciones.
10. Crema de queso para untar.
Usando la pulpa de tu zumo, ¡hacer tu propia crema de queso para untar es muy fácil! Se puede usar en galletas, sándwiches, y mucho más.
Mide aproximadamente ½ taza de pulpa de fruta o de verdura (si usas pulpa de fruta, asegúrate de que la fruta esté bien picada o triturada).
A continuación, mezcla la pulpa con aproximadamente una taza de queso crema. Puedes hacerlo a mano o usar la batidora para batir ligeramente el queso crema.
Salar y sazonar la salsa a tu gusto. Te recomendamos la cebolla y el ajo en polvo para las mezclas de verduras.
Mételo en la nevera durante unas 2-4 horas para que los sabores se mezclen y ¡disfrútalo!
11. Golosinas para perros.
Mima a tu amigo peludo haciendo tus propias golosinas saludables para perros con la pulpa del zumo.
Ingredientes.
- 2 tazas de pulpa de zumo. Algunas frutas y verduras son tóxicas para los perros. Por favor, asegúrate de que no se incluyen en ninguna de tus golosinas.
- ⅓ taza de mantequilla de cacahuete natural.
- ¼ de taza de lino molido.
- ¾ a 1 ½ tazas de avena laminada.
Te recomendamos la zanahoria, la col rizada, el pepino, la manzana (sin semillas), la lechuga, el apio, las espinacas, el melón y la pera. Antes de preparar una golosina, asegúrate siempre de que los ingredientes son seguros y saludables para tu amigo peludo. Consulta a tu veterinario ante la duda.
Instrucciones.
- Precalienta tu horno a 175ºC.
- Mezcla todos los ingredientes. Vierte lentamente la avena laminada hasta obtener una buena consistencia de la masa.
- A continuación, usa la mezcla para formar formas de golosinas.
- Colócalas en una bandeja para hornear y cocínalas de 50 a 60 minutos.
Otros usos.
- Mezcla la pulpa en un batido para añadir fibra.
- Tintes para la ropa. ¿Sabías que la pulpa de zumo puede usarse para teñir la ropa? Si te parece curioso, aquí tienes un manual.
- Prepara un “té de frutas” hirviendo la pulpa de la fruta con agua, añadiendo especias como canela o jengibre, enfriando y colando después.
- Usa la pulpa de las verduras para añadir densidad nutritiva a los macarrones con queso o a la salsa de la pasta, o ponla en capas en una lasaña.
- Utilízala en hamburguesas o buñuelos vegetales caseros. La pulpa añade humedad, sabor y nutrición.
- Usa la pulpa de frutas o verduras para añadir sabor, textura y humedad a las tortitas.
- Usa la pulpa para la corteza de la pizza cruda.
- Puedes hacer mermelada de pulpa.
- Deshidratar y usar como pan rallado.
- Usarla en recetas de cuidado de la piel DIY como exfoliantes, mascarillas y jabón.
