Preparar los alimentos de manera higiénica, siguiendo las recomendaciones de seguridad alimentaria, es fundamental para prevenir enfermedades causadas por bacterias, virus o toxinas presentes en los alimentos.
Las intoxicaciones alimentarias son un problema de salud pública global que afecta a millones de personas cada año. Estas pueden causar desde molestias leves hasta enfermedades graves e incluso la muerte.
¿Cuáles son las principales causas de las intoxicaciones alimentarias?
Las intoxicaciones alimentarias son causadas por la presencia de bacterias, virus, parásitos o toxinas en los alimentos. Estas pueden contaminar los alimentos en cualquier etapa de la producción, procesamiento, distribución o preparación.
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Los principales riesgos incluyen:
- Manipulación inadecuada de alimentos: No lavarse las manos, usar utensilios contaminados, no cocinar los alimentos a la temperatura adecuada.
- Contaminación cruzada: Mezclar alimentos crudos y cocidos.
- Almacenamiento incorrecto: No refrigerar los alimentos perecederos, dejar los alimentos a temperatura ambiente por mucho tiempo.
- Consumo de alimentos vencidos o en mal estado.
- Agua contaminada: Utilizar agua no potable para lavar alimentos o preparar bebidas.
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Recomendaciones del Senasa
Protege tu salud estas fiestas. El Senasa te recuerda que la prevención es fundamental para disfrutar de comidas seguras. Las altas temperaturas, el transporte y una buena manipulación de los alimentos son la clave para evitar enfermedades.
Antes de preparar cualquier alimento, es imprescindible lavarse las manos en profundidad con agua y jabón durante 40-60 segundos. Además, desinfecta a conciencia todas las superficies que entrarán en contacto con los alimentos.
Hidrátate seguro: Utiliza siempre agua potable para beber y lavar los alimentos.
Cocina bien: Asegúrate de cocinar completamente la carne, el pollo y el pescado.
Refrigera a tiempo: No dejes alimentos a temperatura ambiente por más de 2 horas. Guarda en la heladera inmediatamente.
Para los refrigerados: Guarda los alimentos cocidos y perecederos en la nevera, preferiblemente a menos de 5°C.
Para los calientes: Mantén la comida caliente a más de 60°C hasta el momento de servirla.
Separación: Siempre separa los alimentos crudos de los cocidos. Usa utensilios distintos para cada tipo.
Huevos: Cocina los huevos completamente hasta que estén sólidos por dentro.
Descongelación: Descongela los alimentos en el refrigerador o microondas, nunca a temperatura ambiente.
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Rotulado: Revisa siempre la fecha de vencimiento de los productos antes de comprarlos.
Compra: Elige los productos refrigerados y congelados al final de tu compra para mantenerlos fríos.
Transporte: Protege los alimentos congelados y refrigerados del calor y el sol durante el transporte.
Con información de: https://www.argentina.gob.ar/senasa